Lo que parecía una tarde normal se convirtió en un fenómeno viral cuando un robot humanoide, disfrazado como 'El Chavo del 8”, fue captado caminando por la capital tamaulipeca. Su andar firme, acompañado de un ingeniero que apenas podía seguirle el paso, desató risas, asombro y miles de reacciones en redes sociales.
El video, compartido originalmente por la empresa desarrolladora Nix-Lab, muestra al robot avanzando con naturalidad por una calle, mientras se escucha a alguien decir entre risas: “No nos deja ayudarlo a correr”. La escena, tan inesperada como curiosa, fusionó nostalgia televisiva con tecnología de última generación.
Viral en segundos: humor, memes y sorpresa
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En cuestión de horas, el clip acumuló miles de visualizaciones y comentarios. Algunos usuarios celebraron el avance tecnológico, mientras otros se dejaron llevar por el humor, creando memes donde el “Chavo-robot” huye de Doña Florinda o evita que lo cacheteen como a Don Ramón.
Lo que más llamó la atención fue su capacidad para caminar sin asistencia, girar, mantener el equilibrio e incluso reaccionar al entorno. No se trataba de un disfraz, sino de un robot completamente funcional.
¿Quién está detrás del robot?
El responsable es Nix-Lab, una empresa de ingenieros en mecatrónica de Tamaulipas, dedicada a acercar la robótica a espacios públicos, educativos y culturales.
El modelo se llama Chat-BoT y fue presentado oficialmente durante la Feria Tamaulipas 2025. Su diseño permite que funcione como:
- Recepcionista o guía en museos y dependencias gubernamentales
- Asistente en parques, zoológicos y centros culturales
- Anfitrión interactivo para turistas y visitantes
- El robot puede hablar, contestar preguntas básicas, moverse con autonomía y reconocer su entorno
Tecnología con sabor a barrio
El fenómeno del “Chavo-robot” demostró que la innovación también puede tener identidad mexicana. Con su gorra a cuadros, tirantes y playera remendada, el autómata logró conectar con el público no solo por su tecnología, sino por representar un ícono de la cultura popular.
Lo que comenzó como una demostración técnica terminó convirtiéndose en una mezcla perfecta entre nostalgia, humor y futuro.