El nombre de Rigo Tovar sigue resonando en la cultura popular mexicana como uno de los íconos más grandes de la música tropical. Sin embargo, el artista volvió a estar en el ojo público, luego de una reciente entrevista a su viuda, Isabel Martínez, quien confesó una polémica realidad en su matrimonio.
Originario de Matamoros, Tamaulipas, el cantante conquistó al público con su carisma único y canciones que se convirtieron en himnos generacionales. Su innegable talento que lo llevó a crear éxitos atemporales como "Mi Matamoros Querido".
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Pese a toda la popularidad, detrás de la brillantez artística se escondía una historia personal que hoy genera profundas reflexiones. Una de estas es su relación con Isabel Martínez, quien era demasiado joven cuando el artista mostró interés en ella.
Entrevista con la viuda de Rigo Tovar: "yo tenía 13 y el 30"
En una reveladora entrevista con la periodista Matilde Obregón, Isabel narró cómo conoció a Tovar en 1976 durante un baile al que asistió acompañando a su hermano músico.
Desde ese primer encuentro, el artista comenzó a buscarla, llegando a proponerle que viajara con él a Torreón en un segundo encuentro, para uno de sus conciertos. La adolescente, de entonces 13 años, rechazó la invitación por considerarla inapropiada.
"Me dice: 'fíjese que hoy voy a ir a tocar a Torreón, la invito. Si quiere ir conmigo la invito y yo mismo la traigo de regreso mañana. Aquí tengo mi autobús , aquí afuera' y así a mi ya no me gustó. El ya tenía 30 años (...) yo solamente viajaba con mis papás, con mi familia ", relató Isabel Martínez.
Con el tiempo y el consentimiento de sus padres, la relación se formalizó en un matrimonio celebrado en Tampico.
"Nuestro noviazgo inició en mayo y nos casamos el 2 de septiembre, y en esos meses, solamente tres veces me vino a ver, toda la relación fue por teléfono", confesó la viuda de Rigo Tovar.
Este episodio biográfico adquiere nuevas importancia cuando se analiza con la mirada actual. Expertos en protección infantil señalan que, aunque en los años 70 estas uniones no generaban el mismo rechazo social que hoy, el patrón de comportamiento del cantante presenta similitudes con lo que actualmente se conoce como grooming, cuando un adulto establece contacto con menores con fines afectivos o sexuales.
Más allá de esta polémica, la trayectoria de Tovar también estuvo marcada por desafíos de salud. El artista enfrentó una batalla contra la retinitis pigmentosa, enfermedad degenerativa que lo dejó ciego progresivamente, hasta su fallecimiento en 2005 a los 58 años.
La discusión sobre cómo conciliar el legado artístico con las acciones personales de figuras históricas sigue vigente. Mientras sus canciones siguen sonando en fiestas y reuniones familiares, su historia personal invita a reflexionar sobre la evolución de los valores sociales y la protección a menores.