La capital de Rusia, Moscú, moderniza sus servicios de transporte para adaptar una nueva forma de pago. Este jueves se llevó a cabo la muestra de cobro por reconocimiento facial en el metro de la ciudad.
Este último gran y controvertido avance en la forma de efectuar los pagos en establecimientos se exhibió para indicar a las personas cómo será llevado a cabo dicho sistema.
Anna Lapushkina, vicedirectora del servicio de prensa del departamento de Transportes de la ciudad de Moscú, indicó la manera en que el reconocimiento facial funciona para acceder al cobro del pase al transporte público.
"Los pasajeros no tendrán que llevar consigo ni su teléfono móvil, ni tarjeta de metro, ningún ticket. Solamente tendrán que proporcionar sus datos, una foto y sus datos bancarios en la aplicación" indicó Anna Lapushkina.
El metro de Moscú es uno de los transportes más frecuentados en toda Europa; con esta medida, se busca agilizar la entrada de las personas, reduciendo drásticamente los tiempos de espera. En palabras de Anna Lapushkina, este método de pago sería "3 veces más rápido" que los sistemas de pago tradicionales.
De acuerdo con las autoridades del metro, la medida garantizará la seguridad absoluta en el manejo de los datos personales de cada uno de los pasajeros, sin dar más detalles al respecto.
Actualmente el sistema se lleva a cabo con algunos voluntarios y empleados del metro, probando su eficacia. Este servicio se liberará al público a mediados de octubre en las 241 estaciones del "palacio subterráneo", inaugurado el 15 de mayo de 1935.
En detalles de la forma en la que funciona este sistema se aclara la acción de los torniquetes frente a fotografías, negando el acceso hasta presentar el rostro real de la persona a acceder al complejo.
A pesar de instaurar esta nueva forma, las tradicionales tarjetas, tickets y demás modos de pago seguirán vigentes.
El uso de las cámaras en Rusia para identificar a las personas avanza a pasos agigantados en la nación; tan solo en la capital se utilizaron medidas como esta para identificar a las personas que no cumplían con el confinamiento obligatorio.
Ante esto, varias ONG's rusas e internacionales se pronunciaron al respecto, indicando la vulneración de la privacidad en las personas, el tráfico de su información personal y la utilización de estos para monitorear su comportamiento.
"La utilización de estas tecnologías tiene serias implicaciones, pues vulneran los derechos humanos y las libertades fundamentales y se están utilizando para la persecución política", afirmó el viernes pasado en un comunicado Human Rights Watch (HRW).
La nueva forma de pago en el metro de Moscú, a través del reconocimiento facial, dará de qué hablar en un tiempo.
Jesús García