La disponibilidad del agua ha sido todo un tema en los últimos días, pero si bien Nuevo Laredo está en semáforo rojo y el nivel del río no permite la operación óptima de las extracciones y bombeo, hay que separar un poco estos temas y entender que está garantizado el consumo humano de nuestra comunidad y que ya sea en crisis o en bonanza, hay que cuidar este recurso con un uso responsable en casa y negocios, especialmente los dedicados al lavado de autos, conocidos como “car wash”.
El nivel del río ronda los 28 centímetros y el mínimo para el bombeo es de 35 centímetros, por lo que la extracción de agua del Bravo en estos momentos no es la más óptima, pero no dependemos sólo de la profundidad del río, sino del almacenamiento de la presa La Amistad, que afortunadamente se benefició un poco con las lluvias de las últimas semanas en el área de Acuña, pasando de 19 a 24 por ciento de su capacidad de llenado.
Esas reservas son las que nos garantizan que el consumo humano esté garantizado, tanto así que no ha sido necesario tomar medidas como el tandeo, que en su momento se implementó en Nuevo León.
La colocación de la primera piedra de la Planta de Boing o Cooperativa Pascual (la empresa de jugos) en Nuevo Laredo, en cualquier época hubiera sido una buena señal, pero en estos tiempos es algo incluso más destacado.
Vivimos hoy en día uno de los momentos de mayor incertidumbre para las inversiones, desde pequeños hasta grandes empresarios han pausado proyectos en todo el continente, entre las duras políticas y agresiva guerra comercial de la Administración Trump que dificultan los negocios a nivel internacional, hasta el difícil clima económico que prevalece en el mundo por otros aspectos.
Por lo anterior, invertir ahora, es una apuesta que se hace con mayores precauciones que en años previos, y si bien muchos dieron un paso atrás para tratar de comprender el panorama y tal vez predecir un poco los efectos, se sigue registrando esa confianza para tener a Nuevo Laredo como una sede para el negocio.