De acuerdo con la importante biografía del El doctor Carlos Canseco González preparada por el conocido compañero rotario Francisco Domínguez López, Canseco González fue el primer mexicano en ocupar la silla presidencial de Rotary International en los años 1984-1985. Su padre del mismo nombre, nació en Tampico en 1889, quien después de estudiar medicina en la Ciudad de México, regreso a su tierra natal en 1912, durante la época del auge petrolero en Tampico; seis años después, contrajo nupcias con Esperanza González, nieta del expresidente de México Manuel González. El 17 de Marzo de 1921, nació el primero de los 10 hijos que tuvo el matrimonio, al que bautizaron con el nombre de Carlos, quien a la postre se convertiría en un prominente médico cirujano, eminente maestro y distinguido rotario.
A los 12 años de edad, Carlos sufrió su primera exposición al dolor y sufrimiento, cuando un fuerte ciclón destruyó prácticamente la ciudad de Tampico, y a la vez, su primera experiencia para incursionar en el ámbito de servir, puesto que durante esa tragedia convivió estrechamente con los damnificados y experimentó la práctica de la medicina al actuar como paramédico ayudando a su padre. En 1946, a los 28 años de edad, fue fundador de la Sociedad Mexicana de Alergia e Inmunología en Tampico. Ingreso al Club Rotario de Monterrey en 1950 y 34 años más tarde, en 1984, fue presidente de Rotary International, donde fue particularmente muy activo y creador del plan para inmunizar a todos los niños del mundo contra la poliomielitis, conocido desde entonces como Polio-Plus, programa bajo el cual se han vacunado miles de millones de niños en el mundo.
Terminado su presidencia el doctor Canseco González pasó a formar parte de la Junta de Fideicomisarios de la Fundación Rotaria hasta 1991, presidiendo dicha fundación en dos ocasiones. Ese año se le nombró consultor del Comité de Programas de la Fundación Rotaria hasta 1994. Desde 1995 actuó como responsable para América Latina del Comité Internacional Polio-Plus. En el 2004 fue galardonado por el Senado de la República Mexicana con la Medalla Belisario Domínguez y fue responsable de la recaudación de fondos para la construcción del primer hospital de niños en la ciudad de Monterrey, Nuevo León.
El doctor Carlos Canseco González fue un hombre humilde que adoraba a su familia y vivía para servir y no obstante que dejó este mundo físicamente el 14 de enero de 2009, en realidad él no se ha ido puesto que en donde quiera que hay un buen Rotario, ahí está él. Y cada vez que en la boca de un infante se dejen caer dos gotitas de vacuna contra la polio, allí estará el doctor Carlos Canseco González, quien fue el creador e implementador del programa más importante en el mundo para erradicar la polio, reconocido como el mejor rotario de América Latina, del Distrito Rotario 4130 y del que nos orgullecemos todos los rotarios de Nuevo Laredo y del mundo.
Sin duda alguna un gran personaje.
Hasta pronto.