Con la inminente expiración del contrato con Veolia, que antes se llamaba Setasa -será que el cambio de nombre fue como divorcio y nuevo matrimonio sin que nos diéramos cuenta-, llega el momento de ponernos serios y analizar cuál es nuestro futuro con la siguiente empresa con la que nos casaremos para que se encargue de recoger la basura en Nuevo Laredo. Porque si algo necesitamos, es una empresa que realmente cumpla con su trabajo, ahora sí que sea la mejor ¿no?
Primero que nada, señores, necesitamos un servicio completo y eficiente. La ciudad parece un campo minado de tiraderos clandestinos porque, ¡sorpresa!, no tenemos un programa de recolección que funcione. Sólo hay que darse una vuelta por la ruta del Jabalí, uno de los pocos espacios naturales que tenemos, para ver montones de basura arruinando el lugar. Y no es el único lugar afectado; otras zonas verdes están igual de llenas de desechos. ¿Por qué la gente se ve obligada a tirar su basura en estos lugares si ya estamos pagando un contrato millonario para que una empresa haga ese trabajo? Algo no cuadra, amigos.
También urge implementar un programa de reciclaje porque, a estas alturas, ignorar la necesidad de cuidar el medio ambiente es como taparse los ojos para no ver el elefante en la sala. Vidrio, metales, papel (y todo lo que se pueda reciclar) deben ser reciclados. Es hora de ser conscientes.
Otro punto clave: la transparencia en el proceso de contratación. Queremos saber cómo se está eligiendo a la nueva empresa, quiénes están en el proceso, qué propuestas hay sobre la mesa, cuánto cuesta, y, muy importante, ¿cuáles serán las sanciones si no cumplen? Porque la transparencia no es un lujo, es un derecho. Y, por cierto, ¿por cuántos años se va a otorgar la concesión? Tal vez eso de dárselo por 30 años no sea la mejor idea. Quizá convendría empezar con cinco, ver si cumplen, y ya después hablamos de compromisos largos.
Este análisis también debe incluir la opinión de expertos, como ingenieros y analistas de costos. Nada de decisiones tomadas en lo oscurito. Todo debe ser abierto y transparente, así que esperamos que se hagan las cosas bien.
¿Usted, qué opina?