EN UN LUGAR DE LA CANCHA

Mexicanos y cambios de club

Escrito en OPINIÓN el

La vida es una constante toma de decisiones, la mayoría intrascendentes: qué pasta de dientes comprar, cuál ruta agarrar para el trabajo; tomar soda, jugo o agua. Las decisiones en la vida laboral son las más importantes y, me parece que Orbelín Pineda tomó la mejor al intentar por todos los medios quedarse en Europa y lograrlo.


Tal vez sea la clave para ir al Mundial y trascender, pues llega a un lugar en el que va a jugar, pues lo pide quien ya conoce su capacidad y desempeño en la cancha: su extécnico Matías Almeyda. Es importante cuando saben apreciar tu talento y se te reconoce. Este es el inicio de una nueva etapa para el mexicano y ojalá que tenga una larga carrera en el viejo continente.


 


MARCELO FLORES


Ayer mismo se hizo oficial que el juvenil Marcelo Flores va a préstamo con el Real Oviedo de Segunda División de España, lo que le hará dar un salto de calidad, pues este elemento, que promete ser el centro delantero desequilibrante de la Selección Nacional en el futuro mediano, va a tener la oportunidad de competir contra colegas de mayor edad y bagaje.


Con el tiempo encima, posiblemente no le alcance para llegar a Qatar, pero sin duda lo veremos en el tercer Mundial que organicemos, esta vez en sociedad con Estados Unidos y Canadá.


Hace unos veinte años leí (la verdad no sé si sea cierta la historia) que después de que Francia fue sede de la máxima justa, en 1938, y el campeón fue Italia, en el país galo se juraron no volver a probar ese trago amargo. Pasaron 60 años para volver a organizar un Mundial, hasta 1998, pero ahora sí lo ganaron. Desgraciadamente México va a ser el primer país en ser sede tres veces y no ganar ninguna.


Y es que nuestras metas son muy cortas y no es nuestro objetivo ganar el Mundial, sino simplemente llegar a cuartos de final; cuando eso pase el país va a estallar en júbilo. Todas las plazas y centro de reunión en donde se festejan los escasos triunfos de la Selección van a estar a reventar. Mientras tenemos campeones mundiales a los que desdeñamos y ni siquiera conocemos. Tan es así que podrían andar por la plaza Hidalgo y nadie (o muy pocos) les pediría un autógrafo o tomarse una foto con ellos. Increíble.


 


LA CHOFIS


Increíble es también la compra de la Chofis López por parte del Pachuca. Increíble con la más que buena cantera de los Tuzos. Increíble porque La Chofis fue un jugador que se infló desde el principio, y no estoy hablando de su notorio sobrepeso. Mohamed y Ronaldo el fenómeno también sufrieron este problema pero ellos, guardando toda proporción, tenían talento. No es el caso con La Chofis, de quien en un principio se dijo que era “el Messi mexicano”. Por Dios.


Tenía una sola finta y al mes los defensas contrarios ya se la sabían. Se le acabó el corrido. Dejando de lado sus escándalos extracancha (nada extraño para un jugador de las Chivas, pues de allí surgió). Su falta de talento y exceso de peso no me hace augurarle otro futuro más que termine más temprano que tarde en un equipo que pelee el descenso, cuando haya, o incluso en Segunda.