(Quinta parte)
1.- Ròisín Murphy, “Ròisín Machine”.
Trabajo semi conceptual plagado de crítica y explosiva actitud. Electrónico con mente y corazón. Disco rico en texturas, que lo mismo incita a bailar, lo mismo invita a transgredir el momento. La irlandesa, ex Moloko, nos hipnotiza plenamente con un recorrido entrelazado que repasa conceptos como el narcisismo o los celos. Basta escuchar su grito de guerra en el tema “We GotTogether” para constatar que Murphy acuña su propia ley.
2.- Pet Shop Boys, “Hotspot”.
Chris Lowe y Neil Tennant, el dueto conocido internacionalmente como Pet Shop Boys, continúan brindando nombre y significado al pop mundial. Para ellos, el nombre del juego tiene varios apelativos: reinvención, sobriedad, estética, minimalismo.Éste, el decimocuarto trabajo discográfico de los británicos, cierra su trilogía de Berlín (“Electric”, 2013; “Super Day-Glo-Tented”, 2016), muy al estilo deDavid Bowie. Como ya es habitual, PSB abordan temática de corte político; la canción “Dreamland”, junto con Years&Years, hace referencia a la corriente anti-Brexit, con un final contundente donde escuchamos un coro en trasfondo que clama…”no quiero despertar”. Siguen siendo uno de los exponentes más consolidados del electro-pop más delicioso y propositivo, sin perder su buena factura de electrónico con texturas minimalistas.
3.- Lady Gaga, “Chromatica”.
El regreso de una diva en proceso de introspección, que no es precisamente un trabajo intimista; más bien es un tratado extrovertido acerca de la curación emocional y la liberación del alma. “Chromatica” es un recorrido sonoro pletórico de baile, éxtasis y energía. Álbum conceptual que busca recrear un mundo fantástico, virtual y colorido. Al margen del ambiente disco y hedonista que se siente en el opus en cuestión, la temática de algunos cortes es crítico y actual. Luego entonces, ésta entrega cumple su objetivo en todos sus aspectos. Expone a una artista en un punto álgido de su trayectoria; aborda temas punzantes de actualidad y alcanza una fusión bien manufacturada y comercial del house de inicio de los noventas, con los sonidos del dance pop actual, claro, con el sello característico de Lady Gaga, la nueva reina del pop más descaradamente liberador.
4.- Technicolor Fabrics, “Presente”.
Un trabajo pulcro y escueto (apenas siete interpretaciones), con mensajes directos que tocan temas recurrentes. El extrañar a un ser querido, la manipulación y chantaje a las personas de forma inconsciente y las barreras que conllevaría y la madurez como motor de la mejoría de toma de decisiones, son tópicos impresos en las letras de las canciones que conforman este disco. Canciones para soñar despierto, repletas de ritmos y texturas pegajosas. “Presente” es un viaje que busca transmitir el anhelo de vivir el aquí y el ahora, tomar un suspiro para atenuar los problemas y los obstáculos que forman parte de nuestra experiencia de vida.
5.- Tori Amos, “Christmastide” (EP).
Literalmente, un regalo de Navidad por parte de una artista solemne. Cuatro canciones donde Amos nos envuelve completamente con su magia, a través de aquel piano celestial que siempre se convierte en su leal escudero. “Un EP que es una celebración de esperanza”. Así mismo, regresan a colaborar músicos de toda la vida, Matt Chamberlain, baterista y Jon Evans, bajista. Un hermoso paquete que nos puede hacer sentir que recuperamos la visión y el camino para salir delante de esta pandemia.