La reapertura a la exportación de ganado para los productores de Nuevo Laredo tuvo un nuevo tropiezo, luego de detectarse la presencia del gusano barrenador a 131 kilómetros de distancia, en Sabinas, Hidalgo, Nuevo León, complicando de esta manera los avances que ya se tenían para reabrir la frontera por Colombia, Nuevo León, que estaba a sólo unos días de reactivarse, luego del acuerdo con Estados Unidos.
Si bien Nuevo Laredo se considera libre de gusano barrenador, luego de realizar un monitoreo semanal a través de trampas especializadas, los ganaderos locales han manifestado preocupación ante este escenario que se extienda aún más.
“Sí nos afecta este nuevo caso, porque ya está muy cerca de la frontera, es muy difícil y más cuando ya estaba preautorizado la cuarentenaria de Nuevo León para cruzar el ganado de otros estados, entre ellos Tamaulipas, y quien quisiera irse por Nuevo León. Hablábamos de días, de acuerdo con lo que nos había comunicado el Gobierno del Estado, pero con este caso, pues se va a alargar este asunto”, expresó Rodolfo Treviño Benavides, presidente de la Asociación Ganadera en Nuevo Laredo.
Estados Unidos y México habían acordado previamente una reapertura escalonada al ganado, y la frontera de Colombia, Nuevo León, que es la más cercana a Nuevo Laredo, estaba contemplada para la segunda mitad de septiembre; sin embargo, luego de la última detección, esa reapertura es incierta.
HAY PREOCUPACIÓN
Si bien los ganaderos locales han subsistido a través de la venta en el mercado nacional y en subastas, aun así, para dicho gremio, la exportación sigue siendo su principal objetivo, pues además de cumplir con los requisitos y haber realizado esta actividad por años, la consideran mucho más conveniente.
“Se halló el caso ese, al parecer en una becerra, que venía de Veracruz, que es uno de los estados más infectados de gusano barrenador, casi de los primeros que empezaron con este problema. No sabemos bien qué pasó, según se detectó la miasis en un arete Siniiga (Sistema Nacional de Identificación Individual de Ganado) que regularmente se colocan en un animal de ocho meses de nacido, se nos hace un poco raro, y nos pone a pensar que tantos filtros que hay, que no se haya detectado”, puntualizó.