SEGURIDAD

Acusan a mando de proteger a homicida prófugo

El homicida, acusado de asesinar a un hombre y una mujer el 12 de enero de 2018 en la colonia Revolución Verde

Escrito en NUEVO LAREDO el

Luis Ángel Peñaflor Camey, alias “El Camey”, coordinador de la Guardia Estatal en Nuevo Laredo, enfrenta graves señalamientos tras revelarse que protegió en su domicilio al ex policía del Grupo Lince, Roberto Martínez Lugo, prófugo desde 2018 por un doble homicidio en Ciudad Victoria.

La casa de “El Camey” se ubica en la calle Cuauhtémoc, entre Primero de Mayo y el río Soto la Marina, tiene coordenadas 23°45'47.0" N, 98°12'42.7" W (23.763052, -98.211861), denunciaron elementos de la Guardia Estatal.

Peñaflor Camey mantuvo oculto a Martínez Lugo durante años, a pesar de conocer su historial delictivo como integrante del Grupo Motorizado Linces. El homicida, acusado de asesinar a un hombre y una mujer el 12 de enero de 2018 en la colonia Revolución Verde, fue finalmente detenido en Monterrey, Nuevo León, días atrás. Según las denuncias, el hermano de Peñaflor, Byron Otoniel Peñaflor Camey, trasladó a Martínez Lugo a esa ciudad en febrero de 2025 para seguir evadiendo a la justicia.

A pesar de las acusaciones, Peñaflor Camey continúa al frente de la Guardia Estatal en Nuevo Laredo, protegido por el secretario de Seguridad Pública de Tamaulipas, el general retirado Sergio Hernando Chávez García. Elementos de la Guardia Estatal han denunciado esta protección institucional, señalando que Chávez García ha encubierto otros incidentes de Peñaflor, como un accidente en Ciudad Victoria el 20 de octubre de 2023, donde “El Camey” conducía bajo los efectos de alcohol y drogas, según publicaciones en redes sociales.

La impunidad de Peñaflor Camey ha generado indignación entre los elementos de la Guardia Estatal, quienes exigen su destitución y una investigación a fondo. Además, se le señala por nexos con la delincuencia organizada, lo que agrava las preocupaciones sobre la integridad de la corporación. 

Este caso expone las fallas estructurales en la Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas y la necesidad urgente de una depuración en sus mandos. Mientras Peñaflor Camey permanezca en su cargo, la confianza en las instituciones de seguridad seguirá erosionándose, dejando a la ciudadanía de Tamaulipas en un estado de vulnerabilidad ante la corrupción y el crimen.
 
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