En Nuevo Laredo se registran entre siete y ocho casos mensuales de personas mordidas por perros, y entre el 80 y 85 por ciento de estas agresiones ocurren dentro del propio hogar, afirmó Danilo Santos Acevedo, coordinador de Zoonosis del Centro de Atención Canina. Detalló que la mayoría de los afectados son niñas y niños, lo que evidencia la necesidad de reforzar la convivencia responsable entre las familias y sus mascotas.
Santos Acevedo señaló que, aunque se cuenta con un registro mensual, muchas agresiones no se contabilizan, ya que en su mayoría son lesiones superficiales que no llegan al Centro de Atención Canina ni a las unidades de salud. Ante esta situación, exhortó a la ciudadanía a reportar toda mordedura, sin excepción, y acudir de inmediato a recibir atención médica.
Explicó que, ante cualquier agresión por mordedura, la primera acción debe ser un lavado inmediato de la herida con agua y jabón, aplicando chorro continuo durante al menos 15 minutos. “El virus de la rabia es muy agresivo, pero también altamente sensible al agua y al jabón. Por ello, este lavado inmediato es la mejor medida preventiva y está al alcance de todas las personas”, subrayó.
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Una vez en la unidad de salud, personal médico y de enfermería realizan la valoración clínica para determinar si es necesario aplicar toxoide tetánico, antibióticos u otro tipo de tratamiento, dependiendo de si la lesión es superficial, grave, única o múltiple, ya que cada caso requiere un manejo específico.
Posteriormente, personal de Zoonosis acude al domicilio donde ocurrió el incidente, realiza un interrogatorio a los propietarios del animal, revisa la cartilla de vacunación y observa al perro, verificando que se alimente, beba agua y no presente signos de enfermedad.
Con base en esta información se define si la persona lesionada debe iniciar o no el tratamiento antirrábico. El coordinador destacó que, a diferencia de años anteriores, cuando se registraban ataques severos —incluso con lesiones en el rostro—, actualmente no se han presentado casos graves. “Afortunadamente, hasta ahora han sido lesiones superficiales”, afirmó.
Finalmente, reiteró que la educación, el cuidado y el trato afectuoso hacia las mascotas desde temprana edad favorece que se conviertan en animales nobles y sociables, capaces de convivir sanamente con la familia. Asimismo, insistió en la importancia de reportar cualquier mordedura y acudir a valoración médica después de realizar el lavado inicial.