La explosión en Infonavit Fundadores marcó un antes y un después en la mañana del martes 14 de octubre, cuando una acumulación de gas natural transformó en segundos la tranquilidad habitual de la calle Joaquín Argüelles Sur.
A las 8:30 a.m., el rugido del estallido rompió el silencio de la colonia, sacudiendo estructuras y provocando miedo y desconcierto; la onda expansiva alcanzó varias decenas de metros a la redonda.
El antes y después de la explosión en la colonia Infonavit
Antes del siniestro, la vivienda número 45 mostraba el aspecto típico de las casas del sector: fachada sencilla, paredes en tonos claros y un pequeño frente típico de una colonia popular.
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En cuestión de segundos, todo se convirtió en ruina. La imagen captada meses atrás por Google Maps ahora solo sirve como contraste de lo que fue un hogar que esta mañana terminó reducido a cenizas y concreto calcinado. Vecinos relatan que el estruendo se escuchó varias colonias del sur de Nuevo Laredo.
Los alumnos del COBAT 01, ubicado a pocos metros, fueron evacuados entre crisis nerviosas, mientras los cristales de varios salones estallaron por la onda expansiva.
Los servicios de emergencia llegaron minutos después. Protección Civil, Bomberos y Cruz Roja combatieron las llamas que devoraban el inmueble. A pesar de los esfuerzos, Any Lu Campos, no resistió las quemaduras que cubrían gran parte de su cuerpo. Un vehículo, estacionado frente al domicilio, ardió junto con los restos de la vivienda.
Hoy, el terreno donde se erguía la casa quedó hecho ruinas. El poder destructivo de la explosión en la Infonavit Fundadores, transformó una jornada cotidiana en un martes negro para Nuevo Laredo.