Nuevo Laredo, Tamaulipas, 27 de abril de 2024. — El Teniente de Caballería Carlos Iván Fernández Barriga falseó ante la Fiscalía General de la República el Informe Policial Homologado al señalar que el personal militar no disparó en contra de un civil, que murió de un balazo, la tarde del viernes en el centro de esta ciudad.
La víctima fue identificada por sus familiares. Es el joven Jesús Fernando Cruz Flores, de 25 años, quien residía con su madre en el Fraccionamiento Santa Cecilia.
Roberto Robles, testigo sobreviviente y el paisano Mario Reyna, víctima colateral, declaran que los militares dispararon en varias ocasiones, asesinando a Jesús Fernando. Además al no encontrar nada ilícito en la camioneta dejaron en libertad a Roberto, amenazándolo para que se retirara del lugar.
En declaraciones grabadas, ambos testigos señalan directamente al personal militar de haber disparado. El connacional, residente en San Antonio, Texas, manifiesta que él no escuchó la sirena de la patrulla castrense, que chocó contra la camioneta donde viajaba la víctima y esta a su vez se colisionó contra su vehículo.
En el Informe Policial Homologado, el Teniente de Caballería Carlos Iván Fernández Barriga, señala que iba al mando de 12 elementos a bordo de 3 vehículos de la SEDENA, con número económico 0916548, 0916550, 0916572.
Asegura que en Jesús Carranza y Mina observaron una camioneta Ford Edge color gris “que al notar la presencia de personal militar mostró una actitud evasiva, acelerando su marcha en dirección sur, por lo que personal militar por comandos verbales y estrobos policiales se les pidió que se detuvieran”.
Esto contradice lo declarado por el testigo sobreviviente y el “paisano”; Roberto señala que los militares dispararon, chocaron contra la camioneta en que viajaban y cuando descendieron, volvieron a balearlos, matando a su amigo Jesús Fernando.
Mario Reyna, residente en San Antonio, Texas, quien iba en un automóvil Toyota Corola en compañía de su madre, Sara Rivera, de 88 años, señaló ““Estaba esperando en la luz roja -por Jesús Carranza y Maclovio Herrera- de repente siento el golpe, bajaron unos muchachos de la camioneta y escucho unos disparos, a uno los detuvieron, pero lo dejaron ir y otro quedó en el suelo” señaló el paisano.
El militar al mando del personal castrense que asesinaron al joven, reconoce que la patrulla Chevrolet Cheyenne número económico 0916548 chocó por alcance contra la camioneta, que estaba haciendo alto en el cruce de Jesús Carranza y Maclovio Herrera.
Y relata, falseando los hechos que “ al momento del impacto uno de los civiles, el cual viajaba en la parte trasera lado derecho del vehículo, descendió y salió proyectado por el impacto, observando que cae sobre la cinta asfáltica, desconociendo si se había lesionado, bajando el personal militar de los vehículos oficiales, acordonando el área y llamando al 911”.
El testigo, Mario Reyna, cuyo vehículo fue impactado por la camioneta chocada por los soldados asegura que “no escuche nada, ni sirenas, solo el golpe y luego oí los disparos, viendo que una persona caía al suelo, dos corrieron, pero a uno lo detuvieron los militares y lo interrogaron y lo dejaron libre, no entiendo porque”.
El joven asesinado por los militares recibió un balazo en la región lumbar, con trayectoria de izquierda a derecha, de abajo hacia arriba –esto implica que le dispararon cuando estaba tirado en el pavimento- afectando el hígado y la columna lumbar, así como la vena cava del hígado, lo que le causó la muerte.
Testigos de los hechos, narraron que los militares dispararon en contra de los jóvenes que iban en la camioneta, poniendo en riesgo a automovilistas y empleados de varios negocios ubicados en el crucero, asegurando que solo chocaron contra el vehículo y accionaron sus armas, dejando en libertad a la única persona que detuvieron.
Dentro de la camioneta Dodge Edge donde iban los jóvenes no se encontró nada ilícito.
La Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas a través de la Policía Investigadora recolectaron evidencias y dispuso el cuerpo de la víctima de los militares fue llevado a una funeraria, dando inicio a una carpeta de investigación.