Si eres de los que haces todo lo que ve en internet para bajar de peso como ayunar por horas e incluso comer por tres días seguido puras manzanas, ten cuidado, ya que solo estás dañando tu organismo al practicar estas dietas alternativas conocidas como ayuno intermitente, sólo por seguir dietas que se difunden por internet y redes sociales recomendadas por los llamados caches de vida, la cual no tiene ni un respaldo científico ni supervisión de profesionales de la salud.
El ayuno intermitente es una opción de tratamiento dietoterapéutico que se basa en buscar periodos de ayuno o de restricción alimentaria para control de peso, pero entre sus desventajas está que, al poner al cuerpo en una situación de déficit de calorías, no es una opción a largo plazo y puede generar efectos secundarios como sensación de hambre, irritabilidad, náuseas, dificultad para concentrarse y ansiedad.
Te podría interesar
“El ayuno intermitente es diferente a lo que recomendamos como una alimentación saludable. Una alimentación saludable la basamos en el plato del bien comer, que incluye tres grupos de alimentos: los cereales como arroz, pan, tortilla; el grupo rojo, que son las proteínas de origen animal, pollo, pescado, huevo, leche y queso, y las leguminosas, que son las proteínas vegetales como el frijol, haba, garbanzo, lenteja y soya; el tercer grupo son las frutas y verduras que nos van a aportar vitaminas y minerales”, dijo Julián del Carme Granados, director de la Unidad de Medicina Familiar no. 78 del Seguro Social.
Comentó que el IMSS cuenta con estrategias de alimentación como NutrIMSS, en la que se dan herramientas para llevar una alimentación saludable, y ofrece a los derechohabientes asesoría nutricional individualizada en las Unidades de Medicina Familiar (UMF).
Señaló que el ayuno intermitente es una opción de tratamiento dietoterapéutico este se basa en periodos de ayuno o dejar de comer en determinado tiempo para controlar el peso, una de sus desventajas, es que se pone al cuerpo en una situación de déficit de calorías, no es una opción a largo plazo y puede generar efectos secundarios como sensación de hambre, irritabilidad, náuseas, dificultad para concentrarse y ansiedad.
“El ayuno intermitente es diferente a lo que recomendamos como una alimentación saludable. Una alimentación saludable la basamos en el plato del bien comer, que incluye tres grupos de alimentos: los cereales como arroz, pan, tortilla; el grupo rojo, que son las proteínas de origen animal, pollo, pescado, huevo, leche y queso, y las leguminosas, que son las proteínas vegetales como el frijol, haba, garbanzo, lenteja y soya; el tercer grupo son las frutas y verduras que nos van a aportar vitaminas y minerales”, dijo.
La base de una alimentación saludable es incluir un alimento de cada grupo para cubrir las necesidades nutrimentales de una persona y subrayó que la práctica del ayuno intermitente puede ser particularmente riesgosa en adultos mayores de 70 años, niños y adolescentes.
“Tampoco se recomienda en personas con antecedentes de trastornos de la alimentación, ni personas que padezcan ansiedad o depresión ya diagnosticadas por un especialista de la salud mental”, indicó.
Dijo que el ayuno intermitente tiene el objetivo de aportar pocas calorías, menores a las que la persona gasta durante el día, para que el cuerpo pueda utilizar otros nutrientes como las grasas como fuente principal de energía y con eso lograr perder peso en las medidas corporales y porcentaje de masa grasa; sin embargo, señaló que cada organismo tiene un impacto diferente, por lo que es importante recibir una atención especializada.
Finalmente, dijo que el IMSS cuenta con un equipo de profesionales de la salud como médicos, enfermeras, nutriólogos y trabajadores sociales, que trabajan en conjunto para evaluar de manera integral a cada paciente, “evitemos seguir recomendaciones que emiten lugares que carecen de respaldo científico”.