Desde hace más de cinco meses la Unidad Covid-19 no tiene uso, pues el material con el que fue construida para hacerle frente a esta emergencia sanitaria no es el adecuado climatológicamente para internar a las personas con este tipo de problemas respiratorios.
Por ello, se adecuó al interior del Hospital General un área de aislados para poder internar a los pacientes y atenderlos, en la que se han ingresado pocas personas, ya que cada vez son menos quienes se enferman; por lo regular son quienes no cuentan con la vacuna contra el coronavirus.
Si bien en lo más álgido de la pandemia se perdieron muchas vidas, también se salvaron muchísimas en este covitario, pero actualmente no son las instalaciones ideales, ya que, al ser construidas con láminas, en tiempo de calor son muy calientes y en invierno muy frías, manifestó Mario Alberto Pérez Coos, director del Hospital General Solidaridad en Nuevo Laredo.
Dijo que primero se adecuó al interior del hospital un área especial con seis camas, pero al no tener ingresos, se redujo a tres, y de éstas se llega a ocupar una, y no todos los días.
“Todavía hay mucho temor por parte de la gente, además que ningún hospital estaba preparado para este tipo de emergencias; es una enfermedad que vino para quedarse”, expresó.
Pérez Coss comentó que a pesar de que el covitario ya no se usa, no puede quitarse, ya que es la Secretaría de Salud la que decidirá y dará las indicaciones en el momento adecuado, aunque no se tenga un uso, ya que es perjudicial para los trabajadores y pacientes por el tipo de material con el que se construyó.
DEBEN ESPERAR ÓRDENES
Añadió que esta decisión de retirar la Unidad Covid le compete al Estado, por lo que una vez que se den las indicaciones, localmente se hará lo propio, por lo que es importante seguir las recomendaciones sanitarias que se hacen desde hace casi tres años, como lavado de manos, uso de cubrebocas en lugares cerrado y la sana distancia.