Laura Ramírez Alvarado pudo terminar la primaria a sus 68 años. Con ella, otras 91 personas concluyeron sus estudios de educación básica por medio del Instituto Tamaulipeco de Educación para Adultos (ITEA).
La recién graduada mencionó que su motivación fue el anhelo de tener el certificado de primaria, las ganas de aprender y a su vez incentivar a sus nietos a seguir adelante y continuar estudiando para no quedarse en el camino.
“Después de 47 años que intenté por primera vez, ahora Dios me dio la bendición de poder lograr estudiar y terminar la primaria”, dijo Ramírez.
Si bien asistió a la escuela y logró cursar los primeros grados por diversas razones ya no pudo continuar, aún hasta los 17 años no sabía escribir bien y batallaba con las matemáticas, años más tarde intentó estudiar en una escuela nocturna pero no se lo permitieron.
“Después me casé, vinieron los hijos, las obligaciones y ya se olvida uno de sus sueños, pero ahora que mis hijos ya son adultos, dije lo quiero hacer, aunque mi hija me decía que ya para qué, que lo olvidara, yo le dije que quería tener mi certificado, decidí inscribirme y en poco tiempo terminé la primaria”, expresó.
Con este logro ahora la familia de Laura está muy contenta, incluso la hija que antes le decía que ya era tarde para ello, ahora está muy orgullosa de su mamá que ya comenzó a estudiar la secundaria. Ramírez Alvarado dijo que cuando inició su vida laboral en una maquiladora llegó a mentir para obtener el trabajo, pues le daba pena decir que no tenía primaria.
“Nunca es tarde y no hay por qué sentir vergüenza, no teman al que dirán, que sí ya estamos viejos para intentarlo, quítense esos prejuicios y que sepan que siempre se puede si nosotros queremos”, finalizó.
La ceremonia de entrega de certificados a jóvenes y adultos que culminaron sus estudios de educación básica, se realizó en las instalaciones del Centro Cívico Carlos E. Cantú Rosas, ante la presencia de familiares y amigos, además de las autoridades educativas y funcionarios como invitados de honor.
“Este es un estímulo para que jóvenes y adultos continúen sus estudios, en esta ocasión gradúan 11 personas de educación primaria, 80 de nivel secundaria y una persona de alfabetización (MONAE), estamos muy orgullosos de ellos”, indicó Miguel Ángel Castillo, coordinador de zona del ITEA de Nuevo Laredo.
De acuerdo a datos del ITEA, en Tamaulipas el 2.5 por ciento de la población de 15 años y más es analfabeta, en Nuevo Laredo esa proporción es del 2.9 por ciento según el último Censo del Inegi, lo que corresponde a más de 9 mil 50 personas en la ciudad.
En Nuevo Laredo hay un rezago de más de 80 mil personas que dejaron trunca su educación básica, pues según el promedio del Inegi, la escolaridad de los neolaredenses de 25 años y más es de 10.5 años, es decir, que la mayoría solo cursa hasta secundaria e inicios de preparatoria.