Un niño de 5 años y una menor de 12 años fueron heridos a balazos por personal del Ejercito Mexicano y de la Guardia Nacional, en dos ataques directos ocurridos la noche del viernes en el poniente de esta frontera.
El pequeño, quien viajaba en una camioneta Jeep Cherokee negra junto con su abuela y dos niñas más, fue blanco de los disparos efectuados por los militares, quienes atacaron directamente el vehículo. El niño sufrió heridas en su brazo derecho, con indicios de posible fractura.
Lidia Soto Rodríguez, la abuela del menor y conductora de la camioneta, acusó: 'Nos dispararon los militares, no iban persiguiendo a nadie. Fue directamente hacia nosotros mientras la camioneta estaba detenida'. Vecinos presenciaron el ataque a la mujer y los tres menores, saliendo de sus hogares para defenderlos ante el temor de que los militares continuaran disparando y causaran más daños.
Tras el ataque, los soldados fueron confrontados por los vecinos, a quienes amenazaron con sus armas. Lanzaron ponchallantas hacia dos jóvenes, nietas de Lidia, que cayeron dentro de un vehículo con varios niños. Una vecina denunció: 'Les avisaron por radio a los soldados que sus compañeros estaban a la vuelta, a tres cuadras, y se fueron, dejando a la señora y al niño herido sin prestarles auxilio, como si fueran delincuentes'.
Lidia, de regreso a casa después de comprar en la tienda Smart, afirmó: 'Los soldados fueron, yo los vi. No iban persiguiendo a nadie; nos dispararon directamente a mí y a mi nieto'. El niño fue sometido a una intervención quirúrgica en el Hospital Laredo debido a la gravedad de la herida en el codo del brazo derecho. Además, Lidia acusó que los militares no solo no ayudaron a su nieto, sino que se burlaron y agredieron a sus nietas y vecinos antes de huir.
MENOR HERIDA MIENTRAS ATENDÍA UNA LONCHERÍA
Casi al mismo tiempo, miembros de la Guardia Nacional dispararon directamente contra una lonchería ubicada frente a la tienda Smart Universidad, hiriendo a una menor de 12 años en la pantorrilla de la pierna derecha.
Sergio Raúl Puente Rodríguez, padre de la menor y dueño de la lonchería, la trasladó al Hospital Laredo, donde fue atendida por personal médico ya que los elementos de la Guardia Nacional no prestaron auxilio y se dieron a la fuga.
"Estábamos trabajando en el negocio cuando empezaron a disparar; le pegaron a la niña, que estaba haciendo lonches", señaló el padre de familia. Destacó que no hubo enfrentamiento en el lugar y que, en vez de protegerse, se encontraron en riesgo. "Uno es gente de trabajo, gente de bien, y no debería estar pasando todo esto", agregó.
En ambos casos, los familiares de los menores heridos por militares y Guardia Nacional exigen justicia y solicitan la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador para castigar a los responsables.