Nuevo Laredo vive una crisis humanitaria sin precedentes ante la llegada de cientos de migrantes extranjeros con la intención de irse a los Estados Unidos en busca de una vida mejor, fenómeno que también se ha visto incrementado entre los mexicanos que llegan a las fronteras en busca de asilo.
“El fenómeno de la migración no va terminar, lo único que ha sucedido es que ha cambiado la modalidad, estamos abiertos, estamos dispuestos a seguir atendiendo a los migrantes desde nuestras Iglesias católicas”, dijo Enrique Sánchez Martínez, obispo de la Diócesis de Nuevo Laredo.
Con las nuevas oleadas de migrantes que vienen desde el sur al país, la crisis irá en aumento, a la par de las necesidades y, si bien la Iglesia está dispuesta a seguir apoyando, se requiere de la ayuda de la sociedad civil para hacerlo en conjunto y no separados.
“Hay un movimiento muy fuerte que viene desde el sur, de Centroamérica algunos ya vienen en camino, se han encontrado con accidentes de migrantes como el que sucedió allá por Chapas, ahí hay muchos, muchos movimientos que desconocemos y que están organizados, hay gente que los organizan muy bien. Estamos dispuestos a poder seguir atendiéndolos, tenemos que hacerlo en conjunto, como sociedad civil tenemos que hacerlo, estamos dispuestos a apoyarlos”, dijo.
La Iglesia no para, y se prepara para poder darles albergue a los migrantes que siguen llegando a esta frontera para solicitar asilo a Estados Unidos, con adecuaciones a las Casas Migrantes con las que cuentan.
“Contábamos con la Casa del Migrante Nazareth, pero tuvimos que abrir otra, que se llama Nazareth Uno, no la abrió nadie más que yo, nosotros la Iglesia Católica, nos han ayudado las autoridades, por supuesto, nosotros abrimos para los migrantes, ahí tenemos más de 200 mujeres con niños y en la casa Nazareth uno, ambas casas están llenas”, dijo Sánchez Martínez.
Detalló que en caso de la Casa Nazareth 1, se adecuará el estacionamiento, en donde se instalarán salones para poder dar más cabida a más migrantes, además, en la otra casa, que se ubica a un lado de la iglesia San Juan de los Lagos, se hará lo propio, con recursos que se donaron de asociaciones católicas Comentó que se sostuvo una reunión con los pastores, con quienes se tocó este importante tema del flujo migratorio y se logró un acercamiento interesante del cual saldrá un buen proyecto.