Los albergues municipales y los pertenecientes a las iglesias, sin distinción de religión fueron saturados tras la llegada de una nueva oleada de migrantes, algunos de quienes durmieron a la intemperie, pues los espacios son insuficientes. En el albergue municipal, ubicado sobre la avenida Madero, se puede apreciar la gran cantidad de migrantes, en su mayoría haitianos que llegaron desde el viernes por la mañana a esta ciudad y en el transcurso del día, todavía este sábado otro grupo se fue acumulando, todos haciendo una fila con sus maletas en mano, para poder entrar al refugio, que desde hace cuatro días luce lleno.
PIDEN AYUDA
Te podría interesar
A través de la Diócesis de Nuevo Laredo se ha extendido la invitación a la comunidad que desee apoyar a la Casa del Migrante Nazareth ante la crisis humanitaria que se está viviendo con la llegada de una gran cantidad de haitianos a la ciudad.
Algunos de los artículos que se están solicitando son desinfectantes, mascarillas, artículos de higiene personal como desodorantes, papel higiénico, cepillos y pastas de dientes, toallas sanitarias, entre otros. Además de desechables y medicamentos de primera mano que pueden ser entregados en Francisco I Madero 350 de la colonia Viveros, en la Casa del Migrante.
NIÑOS DE HAITÍ
Ayer en Nuevo Laredo se celebró el Día del Niño, mientras las familias habitantes de esta ciudad llevaron a sus hijos a parques y plazas, a restaurantes o les compraron diversos obsequios, en las afueras del refugio temporal para indigentes los niños haitianos jugaban con globos o pelotas que recibieron de algunos conductores que pasaban por el lugar, divirtiéndose sin saber que en otro lado de la ciudad había fiesta para otros de su edad. La generosidad de algunas personas se vio cuando a una pequeña haitiana le entregaban una muñeca junto a una charola de quequitos y un par de niños, uno de ellos descalzo, jugaban sobre la banqueta futbol con una pelota vieja.