La crisis derivada de la sequía que aqueja a Nuevo Laredo y la región, llevó a los ganaderos a orgaizar una misa especial para pedir por lluvias que beneficien el campo. Decenas de ganaderos, agricultores y sus familias asistieron ayer a las 6:00 de la tarde a la Catedral del Espíritu Santo para pedir por esta intención.
“Tenemos ya cerca de ocho meses que no llueve, ya la mayoría de las presas están secas, el terreno también, estamos muy apurados, así que entre los compañeros decidimos hacer una misa para reunirnos los más que pudimos. Aquí estamos pidiéndole a Dios por el agua que tanto hace falta”, expresó Rodolfo Treviño Benavides, presidente de la Asociación Ganadera de Nuevo Laredo.
Actualmente son alrededor de 200 socios activos que forman parte de esta asociación, quienes durante los últimos meses se han apoyado para salir adelante ante esta situación climatológica que, si bien, es costumbre de la región, en esta ocasión ha pegado con mayor fuerza a esta actividad económica primordial. “La asociación se compone de socios activos, socios cooperadores y socios ejidales, ya juntando todo somos más de 500 socios.
“Siempre ha estado la situación, sabemos que aquí en esta región siempre estamos en seca y pidiendo agua que es la vida que mantiene el ganado, a los pastisales, son años muy parecidos, pero se ha prolongado un poco más, tenemos desde agosto del año pasado que no ha caído nada importante”, comentó Treviño.
Los ganaderos han registrado pérdidas importantes ante el tema de la sequía, tal como lo reportó también Alejandro López Robles, presidente del Comité Campesino de Nuevo Laredo, quien anticipó afectaciones muy serias para la ganadería de Nuevo Laredo, de continuar en las mismas condiciones.
Los representantes de la Asociación Ganadera y sus familiares guardan la esperanza de que la naturaleza pueda favorecerles, por lo que oraron por ello durante la misa, pues una sola jornada intensa de precipitaciones podría ser la solución a la problemática de estos meses