La Secundaria Técnica 79 pretendía iniciar clases este lunes 14 de marzo haciendo limpieza con los maestros a marcha forzada, pero los daños causados por la tormenta de mayo del 2021 y el largo periodo que pasó durante la pandemia, los sobrepasan y deberán aplazar el regreso presencial de sus alumnos.
“Estamos precisamente en las labores de limpieza y estábamos viendo la factibilidad de regresar el próximo lunes, pero se retrasó por la falta de apoyo; a pesar de que los maestros están trabajando arduamente sí es mucho el trabajo que hay que hacer para retornar a las aulas”, expresó el director Carlos Alberto Banda Rodríguez.
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La tromba provocó la caída del transformador, que ha dejado a la escuela sin energía eléctrica en casi 60% de los salones, sólo se mantienen con uno pequeño, del que han extendido provisionalmente unos cables para poder abastecer por lo menos de luz a las aulas, pero no podrán encender ni aires acondicionados, ni abanicos.
Además, algunas puertas fueron destruidas con los fuertes vientos y la acumulación de tierra ha llegado a todos los rincones del plantel, tanto al interior de los salones como al exterior.
“Las aulas van a funcionar con el 50 por ciento de su capacidad en iluminación, porque ya es necesario el retorno a clases en beneficio de los propios alumnos. Vamos a regresar con el 50 por ciento de los alumnos las primeras semanas, para que tanto el padre de familia como los maestros se vayan acoplando y a partir de la tercera o cuarta semana regresamos en su totalidad”, resaltó.
Para atender la falta de energía eléctrica, la escuela ya notificó al seguro, desde el año pasado, pero no han tenido respuesta, además de solicitar el apoyo al estado y municipio.
La escuela tiene 650 alumnos, en 18 grupos, el director manifestó que el regreso a clases es urgente, debido a que durante la pandemia sólo se ha tenido 55 por ciento de conectividad con los alumnos, cifras muy bajas.
“La idea es aumentar por lo menos a 80 por ciento de contacto con los estudiantes, pues ha habido deserción escolar, pues 10 por ciento de los jóvenes han migrado a otras escuelas o han regresado a sus lugares de origen debido a la falta de ingresos económicos de los padres de familia. También tenemos alumnos que no se han comunicado para nada con la escuela, ya hemos tratado de contactarlos pero sin respuesta”, puntualizó.
Así como la Secundaria Técnica 79, existen otras escuelas que aún luchan con los estragos de la tromba, el burocratismo de los seguros que debían hacerse cargo de resarcir los daños, así como los daños colaterales de la pandemia, todo para poder regresar a clases presenciales bajo una “nueva normalidad”.