Elementos del 16 Regimiento de Caballería Motorizada en Nuevo Laredo se tunden entre ellos en grupos de “Whatsapp”, al grado de acusarse de pertenecer a bandas criminales que operan en la ciudad, lo que podría desencadenar en castigos, deserciones por temor, tragedia y muerte por la rivalidad y la falta de control de los mandos.
Como si se tratara de una pelea entre “verduleras”, los elementos entre ellos cabos y un sargento de este puerto fronterizo sostienen fuertes discusiones a raíz de la llegada de nuevos elementos de otras ciudades, rotaciones entre ellos, la falta de control de los mandos y los recientes hechos ocurridos, en el que falleció el Cabo Gabriel Cisneros, a quienes sus superiores no sólo le negaron sus derechos, sino que lo acusaron de desertor.
Te podría interesar
Con audios y fuertes mensajes lanzados en el grupo de whatsapp, los militares se insultan y se acusan de pertenecer al crimen organizado.
“Jóvenes dejen de subir mam** en ese grupo, si quieren decir algo mándenlo privado, los que están regresando para acá, es porque ya están trabajando para el otro lado -crimen organizado-” se escucha en un audio.
“Ponte la falda de tu madre y empieza a publicar pend…”, es sólo una de las agresiones textuales entre un sargento y un cabo, quien señala que dará aviso de lo que sucede al coronel, José Isidro Grimaldo Muñoz, quien tal parece no tiene control alguno.
Además de las agresiones textuales que se lanzan entre ellos, surge una problemática más entre los militares, pues aseguran que se están realizando “cooperaciones” por encima de los 150 pesos por elemento para compra de ganchos y portatrajes, lo que está prohibido, según afirman.
Parece ser que la austeridad del gobierno federal también afectó a las unidades habitacionales de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), pues con la supuesta “cooperación” se demuestra que no se han bajado recursos a la corporación.
Militares que hablaron con la condición de permanecer en el anonimato por temor a represalias, aseguran que las fricciones que hay podría desencadenar en castigos o incluso algunos elementos lleguen a desertar.
“Pertenezco al escuadrón desde hace buen tiempo, amo a mi país y a Sedena, pero con lo que está pasando, es mejor desertar porque o sigue una guerra o s eviene muchos castigos sólo por joder”, subrayó un elemento.
El domingo 6 de febrero del 2022, el cabo Cisneros (quien estaba estaba adscrito al 16/o Regimiento de Caballería Motorizada), fue encontrado muerto dentro de una camioneta. El vehículo era propiedad del capitán segundo Oscar Hernández Hernández.
En un video viral que circuló en redes sociales, señalan que el Cabo de Caballería Gabriel Cisneros Ramírez murió de un infarto agudo al miocardio; también denuncian que los altos mandos del 16/o R.C.M. de Nuevo Laredo, no presentaron la denuncia correspondiente.
Asimismo, puntualizan que los mandos del ejército manipularon reportes oficiales; en ellos señalaron que, al momento de su muerte, el Cabo de Caballería estaba franco y/o era desertor; lo cual es falso, ya que obedecía órdenes directas del
Capitán Segundo, quien lo envió a comprar cerveza para seguir una fiesta que se tenía en instalaciones militares.
Está situación y el descontento con los mandos del 16 Regimiento de Caballería Motorizada ha causado inconformidad y deja ver la falta de liderazgo y control al interior del cuartel militar, lo cual de no atenderse podría desencadenar hasta en tragedia entre las mismas fuerzas castrenses.