El 15 de enero de 1911 se firmó el cont r ato pa r a edificar la estación de los ferrocarriles en la ciudad, un proyecto decisivo para el desarrollo económico y social y hoy en día, un edificio catalogado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de Tamaulipas como monumento histórico y patrimonio de Nuevo Laredo.
Ferrocarriles Nacionales de México contrató a quienes llevarían a cabo el diseño y construcción del singular edificio con número de clave 2802700. Ficha 0006. La estación de ferrocarril, que hasta entonces era una estructura de madera, fue reemplazada por una construcción de roca firme sedimentada tipo arenisca marina con un estilo arquitectónico victoriano en 1918, año en que se terminó su edificación.
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La forma y materiales usados no son representativos de la localidad, esto se debe a que la concesión se le dio a una compañía inglesa. El inmueble estaba proyectado de dos pisos con un costo de 150 mil pesos, comprendía una sala de espera como área principal, la sección de venta de boletos que a la vez funcionaba como bodega de carga y expreso, habitaciones para el jefe de estación y su familia.
La planta del inmueble está formada por una nave de trazo rectangular con una longitud aproximada de 100 metros y un ancho que varía de 12.30 a 12.50 metros, con una orientación norte-sur, fue restaurado y en el lugar se encuentra el archivo histórico de la ciudad. Por sus características, el INAH de Tamaulipas la ha catalogado como monumento histórico y patrimonio de Nuevo Laredo.