La demanda de entrega de alimentos a domicilio provocó una mayor movilidad de motocicletas de reparto en la ciudad, lo que a su vez casi duplicó los accidentes. Con la llegada de la pandemia, este es uno de los servicios que incrementó el notable circulante en las calles.
Durante todo 2020 en Nuevo Laredo, según estadísticas de Tránsito y Vialidad, se registraron 12 accidentes viales que involucraron a motociclistas, a finales de julio del 2021 se alcanzó esta cifra y está por superarse; por su parte INEGI señala que existe un aproximado de 4 mil 330 motos en la ciudad, entre registrados y no.
Fue a partir de este año con la llegada de servicios a domicilio de las diferentes plataformas digitales en auge, que aunado a la necesidad y/o preferencia de quedarse en casa, intensificó la circulación por este medio de transporte.
POCA CULTURA VIAL
En este contexto, debido a la poca cultura vial que existe en la ciudad, se estima que sean más los incidentes con motos, tomando en cuenta los no registrados.
Sin embargo, para este gremio los automovilistas carecen de conocimiento al tomar el volante, pues para ellos la gran mayoría de los accidentes han ocurrido por imprudencia de automovilistas.
“Nuevo Laredo es una ciudad antivehículos de dos llantas, porque la imprudencia puede más; a veces pareciera que no existiera ley en la carretera, cada quien maneja como quiere y sobre sus propias normas”, señaló Leonardo, quien labora como repartidor de comida de un restaurante en la localidad.
Por el contrario, los automovilistas tienden a atribuir a los motociclistas alta imprudencia por la prisa de entregar los domicilios.
“Piensan que porque llevan motos se pueden meter por cualquier parte, van a toda velocidad con la intención de entregar rápido los pedidos, se meten por donde no deben, por eso ocurren los accidentes”, explicó Jorge, automovilista de la ciudad.