Utilizar la Carretera Aeropuerto a la altura de la avenida Monterrey, implica a cualquier hora toparse con una fila de hasta un kilómetro de poniente a oriente.
La tardanza en las obras del puente ubicado sobre la Carretera Aeropuerto, ha ocasionado meses de afectaciones a los conductores de tráfico pesado y vecinos de las colonias aledañas, pues a diario las vías se congestiona, debido a la desviación que provoca un embotellamiento entre automóviles particulares y tráileres.
“En la mañana, tarde y noche sucede lo mismo, es un batallar cruzar esta parte de la ciudad y además peligroso porque hay mayor afluencia de vehículos pesados, lo que retrasa aún más la movilidad por la longitud que tienen; tampoco hay presencia de autoridades de tránsito, para que regule el movimiento, sobre todo en horas pico”, señaló Francisco Almanza, mientras esperaba en el embotellamiento.
Esta misma desviación, al ser de las principales para los operadores de tráileres, no sólo ocasiona demora entre las vías, también ha generado un desgaste del pavimento, por el paso continuo de automóviles, lo que ha quedado reflejado en baches y pozos que han surgido en el sector.
A pesar de los largos minutos de espera y el caos vial que se genera a diario en este crucero, muchos de los vehículos no tienen más opción que desviarse, ya que el tramo de la carretera cerrada es fundamental, tanto para los camiones de carga que van de salida de la ciudad, como para los que regresan a las distintas agencias aduanales ubicadas en al área.
“Los que tenemos que pasar por este tramo para ir a trabajar, tenemos que irnos con anticipación para no llegar tarde a trabajar o demorar aún más agarrando otros tramos más lejos por el mismo problema”, agregó Almanza.