Durante su conferencia matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum destacó la importancia de implementar políticas que reduzcan el consumo de bebidas azucaradas, enfatizando que estas acciones buscan prevenir enfermedades crónicas y fortalecer el sistema de salud.
En su intervención, Eduardo Clark, subsecretario de Integración y Desarrollo del Sector Salud, advirtió sobre los riesgos de mantener altos niveles de consumo.
De mantenerse una tendencia alta de consumo de bebidas azucaradas, el sistema de Salud podría colapsar, por lo que significa brindar atención médica a los miles de casos de enfermedades crónicas.
Clark explicó que con el incremento del 87 por ciento del IEPS a los refrescos, se espera que durante el primer y segundo año de esta medida el consumo disminuya en alrededor de un 7 por ciento.
Además, se prevé generar aproximadamente 41 mil millones de pesos, los cuales serán destinados al sector Salud para reforzar la atención médica, programas de prevención y promoción de hábitos saludables entre la población.
La presidenta Sheinbaum reiteró que esta medida no solo busca reducir el consumo de azúcar, sino también garantizar que el sistema de salud esté preparado para atender a quienes padecen enfermedades derivadas de malos hábitos alimenticios.
Destacó la importancia de combinar políticas fiscales, educación y concientización para lograr un cambio sostenible en los hábitos de los mexicanos.