Hay un lugar que se ha convertido en el único enclave fuera del territorio continental estadounidense donde el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) ejecuta operativos migratorios de forma sistemática.
En ese sitio, a través de un requerimiento oficial, la agencia ha obtenido datos sensibles de personas con permisos de conducir provisionales, lo cual ha despertado serias preocupaciones en defensores de derechos humanos.
El único lugar fuera de EU donde ICE también hace redadas
Rebecca González-Ramos, directora de las Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) en Puerto Rico, confirmó que más de 5,000 perfiles migratorios están siendo revisados por su equipo desde principios de año.
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Las autoridades buscan identificar a individuos con antecedentes penales o con órdenes de deportación en curso, bajo el argumento de fortalecer la seguridad pública.
Las organizaciones comunitarias cuestionan la legalidad y la ética de solicitar esta información al Departamento de Transportación y Obras Públicas, especialmente porque muchos de los afectados no tienen condenas previas ni vínculos con delitos graves.
A su vez, alertan sobre el efecto disuasorio que estas medidas generan en comunidades trabajadoras, particularmente entre migrantes dominicanos.
La funcionaria federal justificó las acciones de su oficina señalando que el marco legal permite el intercambio de datos entre agencias, pese a que Puerto Rico, al ser un Estado Libre Asociado, mantiene una relación ambigua con la nación estadounidense.
Aunque sus habitantes son ciudadanos, las estructuras políticas del territorio limitan su representación en las decisiones federales, lo que dificulta el cuestionamiento efectivo de este tipo de intervenciones.
Reportan arrestos en la Isla
Durante los últimos cuatro meses, en la isla se han reportado casi 500 arrestos, con un enfoque particular en personas sin papeles y reincidentes migratorios. La estrategia de ICE en Puerto Rico, según González-Ramos, no tiene excepciones: el objetivo es aplicar la normativa sin importar el contexto local ni el tiempo de residencia.
La continuidad de las redadas de ICE en Puerto Rico perfila un escenario incierto para miles de personas que, sin ser consideradas plenamente parte de Estados Unidos, enfrentan las consecuencias más severas de su política migratoria.