La tendencia del dólar en picada prolongada se consolidó este 5 de diciembre, cuando el tipo de cambio concluyó la jornada con una nueva reducción que reafirma la fuerza del peso en el arranque del mes.
Esta trayectoria descendente, sostenida durante varios días consecutivos, ha colocado a la divisa estadounidense en su punto más bajo del año frente a la moneda mexicana, apuntalando un escenario favorecido por los datos macroeconómicos que llegan desde el norte.
Sorprende superpeso y pone en picada al dólar
De acuerdo con los reportes del mercado financiero, el billete verde terminó la sesión con un promedio de 18.18 pesos, una variación ligera respecto al día previo, pero suficiente para mantener su ritmo decreciente.
Te podría interesar
La referencia indica un ajuste marginal del 0.34% en comparación con el cierre anterior, un desplazamiento que confirma la presión constante sobre la divisa estadounidense.
Especialistas del sector cambiario interpretan esta debilidad como una reacción directa a las expectativas de los inversionistas rumbo al próximo anuncio de política monetaria que emitirá la Reserva Federal de Estados Unidos.
Analistas han destacado que la evaluación de los indicadores económicos estadounidenses genera una percepción de mayor cautela, lo que favorece momentáneamente al peso.
En su revisión de final de jornada, Monex anticipó fluctuaciones entre 18.13 y 18.24 pesos durante el periodo nocturno, reflejando un margen ajustado y una actividad relativamente contenida.
En el balance semanal, la divisa estadounidense registra una contracción acumulada de 0.68%, alineándose con una disminución anual significativa que supera el 12%.
Reconfiguración del mercado
Este comportamiento sugiere una reconfiguración en los flujos del mercado cambiario, influida por movimientos globales que han reducido la demanda momentánea del dólar como activo de refugio.
Con dos sesiones consecutivas a la baja y una volatilidad inferior a la observada en los últimos meses, el panorama cambiario dibuja un cierre inusual para esta etapa del año.
Así concluye una semana marcada por el dólar en picada prolongada, un fenómeno que mantiene la atención de analistas y operadores ante posibles ajustes en los próximos días.
