ARGENTINA

Por pobreza da en adopción a su hijo en 1988; mujer corre maratones buscándolo

Paula Liliana Salto, de 56 años, ha recorrido un largo trayecto en su vida, tanto física como emocionalmente

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Paula, cuya infancia y adolescencia estuvieron marcadas por la tragedia y el abuso, encontró en el atletismo un medio crucial para enfrentar su dolor y mantener viva la esperanza de reunirse con su hijo.

Originaria de Quimilí, Santiago del Estero, Argentina, Paula enfrentó un entorno difícil desde temprana edad. A los seis años perdió a su madre y quedó bajo el cuidado de su abuela y su padre, quien luchaba con el alcoholismo. Su juventud estuvo plagada de desafíos, incluyendo el doloroso abuso sexual a los 15 años.

En busca de un futuro mejor, Paula se trasladó a Buenos Aires, donde comenzó a trabajar como empleada doméstica. Fue allí donde conoció al padre de sus hijos y experimentó situaciones de maltrato psicológico y económico.

A los 20 años, ya madre de un niño, Paula se enfrentó a otro embarazo en condiciones de extrema pobreza y sin apoyo. Bajo la presión de su pareja, tomó la dolorosa decisión de dar en adopción a su segundo hijo, Sebastián, nacido el 18 de octubre de 1988 en el Hospital Durand.

A lo largo de los años, Paula nunca dejó de pensar en Sebastián. Tras superar una profunda depresión y varios intentos de suicidio, encontró en su primer hijo, Cristian, la fuerza para seguir adelante. Finalmente, Paula decidió que no podía vivir más con la incertidumbre y comenzó a buscar activamente a Sebastián.

El atletismo como un camino hacia la sanación, durante su proceso de recuperación

Paula descubrió el poder del atletismo. Comenzó caminando, luego trotando, y finalmente participando en carreras y maratones. En cada una de estas competencias, lleva puesta una camiseta que detalla los datos del nacimiento de Sebastián, esperando que alguien reconozca la historia y pueda ayudarla a encontrar a su hijo.

En el reverso de su camiseta, se lee: «Antes de llegar al cielo te encontraré». En el frente, están los detalles precisos de su hijo: «Sebastián nació el 18 de octubre de 1988 a las 13:35 en el Hospital Durand, cerca del Parque Centenario». Cada carrera para Paula representa un paso más hacia la posibilidad de reunirse con Sebastián.

La historia de Paula es un testimonio de perseverancia y un amor maternal indestructible. Mientras continúa corriendo y trabajando como enfermera en el área de maternidad, Paula sostiene la esperanza de algún día encontrar a Sebastián.

Paula espera que su historia inspire a otros y que, con el apoyo de la comunidad, pueda finalmente abrazar a su hijo.

Si lo viera hoy, le diría que lo amo y que lo he amado desde el día que estaba dentro de mí. Que lo entregué para protegerlo y que, en aquel momento, no tuve otra opción. Las cosas suceden por alguna razón y encontrar a Sebastián sería mi mayor logro 

Con su espíritu inquebrantable y su determinación, Paula continúa participando en maratones, llevando consigo la esperanza de un reencuentro y la convicción de que algún día, su búsqueda culminará en el abrazo más anhelado de su vida.