Cuando una persona es asustada, una de las acciones más comunes es ofrecerle un “bolillo pa'l susto”, pero, ¿tiene algo de efectividad esta costumbre?, te sorprenderá saber que sí, sirve y tiene una base científica.
Seguramente habrás visto que a las personas, luego de experimentar un susto o una situación, se les ofrece una pieza de bolillo, inclusive los hayas escuchado en tono de broma, pues esta costumbre está bien arraigada.
Nayeli Xochiquetzal Ortiz Olvera, profesora de la Facultad de Medicina de la UNAM, indica que esta recomendación, pueda sonar absurda o causar gracia, cuenta también con fundamentos científicos.
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De acuerdo con la catedrática, las personas luego de pasar por una situación de estrés, se provoca un aumento en la producción de ácido gástrico, lo que genera un dolor en el vientre percibido como vacío, causando náuseas y otros malestares.
“En tales casos, ingerir un pan reduce esa acidez tan molesta, como bien sabían nuestros antepasados”, explica Ortiz Olvera.
Siendo entonces cuando la frase resalta, “un bolillo pa'l susto”, pues de acuerdo con la profesora de la UNAM, este es un alivio confiable luego de ser sometidos a un episodio de estrés.
“Por su cantidad de carbohidratos, este alimento inhibe la secreción de ácidos y nos ayuda a reponernos de un susto. Además, por ser masudo y tener la corteza dura, nos obliga a masticar, lo cual nos distrae y aminora nuestros miedos”, explica.
Por último, la educadora comento que no solo el pan ayuda, sino también las frutas.
“El pan funciona, pero también la fruta, la fibra o algunos lácteos como yogur”.