GASTRONOMÍA NACIONAL

Cicirisco con champurrado: el mejor remedio contra el crudo frío invernal

Ya llegaron los fríazos para cerrar el resto del año y sin duda, un pretexto para empezar a consumir las delicias culinarias propias de esta helada estación

Una delicia contra el frío.
Una delicia contra el frío.Créditos: Internet | El Mañana
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Los fríos invernales han llegado con fuerza, invitándonos a disfrutar de las especialidades gastronómicas que reconfortan el alma en esta temporada.

Entre las delicias que resaltan, el cicirisco, un pan tradicional de Tejupilco, Estado de México, destaca como una auténtica joya de la cocina mexicana.

Cicirisco con champurrado, un tesoro del sur mexiquense

El cicirisco es un pan único que combina tradición y versatilidad. Con una textura inigualable, se adapta a cualquier combinación, ya sea dulce o salada. Desde gelatina, arroz con leche y mermelada, hasta huevo con jamón, frijoles con chorizo o incluso chicharrón, este pan es un lienzo gastronómico para los paladares más exigentes.

En fechas festivas, los habitantes de Tejupilco lo preparan de manera especial: remojado en una mezcla de miel de piloncillo, canela y queso, convirtiéndolo en un postre irresistible que evoca la calidez de las tradiciones familiares.

Considerado un símbolo de identidad en Tejupilco, el cicirisco ha conquistado corazones más allá de las fronteras mexiquenses.

En redes sociales, no faltan los elogios hacia este pan. “Lo más sabroso”, comenta Marchris Salasar, mientras que Elda Martínez expresa su deseo de aprender la receta. Para otros, como Gallito Vázquez, el cicirisco es parte del carácter único de su tierra.

El complemento perfecto

Aunque el cicirisco brilla por sí solo, su maridaje con una taza de champurrado caliente lo eleva a otro nivel, especialmente durante las gélidas mañanas invernales. Este dúo ofrece no solo sabor, sino una experiencia que reconforta y celebra la riqueza de nuestras raíces culinarias.

Este invierno, déjate abrazar por el calor del cicirisco y el champurrado, una combinación que, más allá de alimentar el cuerpo, nutre el espíritu.