HISTORIAS URBANAS

El día que vendieron la Virgen de Guadalupe por 12.5 millones de dólares

La imagen de la Morenita ha estado en el centro de una controvertida decisión: la comercialización de su imagen por integrantes de la alta curia mexicana

La Virgen de Guadalupe, la máxima figura religiosa de los católicos mexicanos.
La Virgen de Guadalupe, la máxima figura religiosa de los católicos mexicanos.Créditos: Internet
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Desde 1985, Norberto Rivera Carrera ha sido una figura prominente en la Iglesia Católica como Arzobispo Primado de México. Conoce cómo una vez vendieron la Virgen de Guadalupe por 12.5 millones de dólares.

Durante su mandato, no solo ha ofrecido oraciones por políticos y empresarios, sino también ha estado en el centro de una controvertida decisión: la comercialización de la imagen de la Virgen de Guadalupe.

El día que vendieron la Virgen de Guadalupe

El 31 de marzo de 2002, se firmó un contrato que concedió los derechos exclusivos de explotación de la imagen guadalupana a la empresa estadounidense Viotran por 12.5 millones de dólares.

La transacción, liderada por Diego Monroy, rector de la Basílica de Guadalupe, y María Teresa Herrera Fedyk, representante de Viotran, también incluyó las imágenes de San Juan Diego y el logotipo de la visita de Juan Pablo II a México.

El contrato estipulaba que Viotran podría comercializar una amplia gama de productos, desde textiles hasta objetos de oro y plata, todos ellos con una "bendición especial" de la Basílica.

Sin embargo, este acuerdo generó críticas de expertos en derechos de autor y defensores del patrimonio cultural. Ramon Obón León, destacado perito en la materia, declaró que la imagen de la Virgen pertenece al pueblo mexicano y no puede ser vendida en exclusividad.

Además, señaló que la Ley Federal del Derecho de Autor permite la libre reproducción de obras artísticas de carácter popular sin autor identificable.

¿Legal o ilegal?

Jesús Ferral Novoa, director de la organización Cronópolis, calificó el contrato como ilegal y contrario al espíritu de las leyes mexicanas, que prohíben a las asociaciones religiosas lucrar.

A pesar de estas críticas, la Procuraduría General de la República determinó que el contrato no violaba la legislación vigente de ese entonces, argumentando que la imagen es reconocida como creación divina y, por ende, no sujeta a derechos de autor.

La decisión de comercializar la Virgen de Guadalupe, uno de los símbolos más emblemáticos de México continúa dividiendo opiniones y plantea preguntas sobre los límites entre la fe y el lucro.