Orgullosamente mexicanas, las baterías o acumuladores de auto comenzaron a desarrollarse en 1928, al mismo tiempo que los primeros carros se fabricaban.
Y es en el estado de Chihuahua, México, donde don Luis Terrazas Hernández, su creador, experimentó buscando una fuente de energía acumulada para los motores de automóviles que comenzaba a evolucionar, naciendo así las baterías LTH, en honor a su inventor.
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Actualmente las baterías LTH son de los acumuladores más desarrollados tecnológicamente del mercado, su desarrollo iría paralelamente con el de los motores de autos, la marca desde sus comienzos buscó abastecer de energía los componentes eléctricos de los automóviles sin que perdieran energía.
¿Qué son los acumuladores de autos?
La batería o acumulador es un dispositivo electroquímico que posee en su interior varias celdas metálicas de energía (también conocidas como vasos por su forma y por poseer agua desmineralizada) que proporciona la energía eléctrica para el motor de arranque (también conocida como marcha) de un motor de combustión, como por ejemplo de un automóvil, de un alternador del motor o de la turbina de gas de un avión.
La primer batería de auto
La primer batería para auto como hoy la conocemos fue inventada por el italiano Alessandro Volta, pero anteriormente ya había un antecedente, la primera batería de plomo ácido fue creada ya avanzado el siglo XIX, diseñado por el ingeniero Henry Tudor, pero en aquella época, la industria del automóvil todavía no estaba muy desarrollada y el uso de baterías se limitaba a algunos vehículos exclusivos.
Las baterías han evolucionado para abastecer de energía a los autos modernos, ya que desde hace años las personas demandan mayor tecnología para más comodidad y seguridad, pero también los automóviles son equipados con más sensores electrónicos, más partes eléctricas que demandan mayor energía.
Los acumuladores LTH van a la vanguardia y se siguen evolucionando con los nuevos modelos de autos como desde que iniciaron operaciones en 1928