Una muy triste muerte halló Santiago, un niño de tan sólo 4 años de edad quien padecía cáncer, en la Unidad Médica de Alta Especialidad 25 del IMSS en Monterrey; el pequeño murió el pasado 2 de julio, pero el calor extremo en la Clínica empeoraron su situación hasta morir.
El pequeño, quien tenía diagnóstico de leucemia linfoblástica aguda, fue internado en dicho hospital para recibir una de sus quimioterapias, pero ello se le complicó gracias a una bacteria obtenida ahí mismo causada por las altas temperaturas ante fallas del sistema de climas.
Santiago lo sufrió al igual que todos los niños que se encuentran en en lugar, además del calor no cuentan con elevadores funcionales y son las madres quienes han alzado la voz, pero no han tenido éxito.
El niño estuvo dos meses aislado en el tercer piso en Oncología Pediátrica. Hacía mucho calor y el pequeño tenía fiebre. Un ventilador calmaba un poco la situación, pero por supuesto que no era suficiente.
El calor atrajo bacterias, las bacterias aceleraron un final terrible para Santi y su familia: la muerte del menor.
Johana Bravo, la mamá del niño de 4 años de edad, tuvo que contar su experiencia. A ella se le sumaron empleados de la Clínica 25, quienes tuvieron que bloquear la Avenida Lincoln para protestar por todas las carencias que tienen, mismas que los están llevando a resultados mortales e irreversibles.
Las fallas en los elevadores han provocado que los niños se queden sin estudios médicos al no poder trasladarlos fácilmente entre piso y piso, incluso algunas cirugías también han tenido que cambiar de horario y de fechas.