Hoy se cumplen 55 días en los que Nuevo Laredo ha padecido un calor de 40 grados centígrados o más que no se ha vivido, al menos desde hace 77 años (1946) cuando se inició el monitoreo de las temperaturas por parte del Servicio Meteorológico Nacional, pero las buenas noticias es que el pronóstico contempla que a partir del 21 de agosto la situación empiece a cambiar.
La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) declaró a julio del 2023 como el más caliente de los últimos 174 años en este hemisferio.
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De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, el lunes la temperatura estará por fin por debajo de los 40 Centígrados y aunque la reducción será de apenas unos grados, para quienes viven en esta frontera representa un gran alivio.
De acuerdo con las estadísticas, desde el 9 de junio a la fecha se han registrado 55 días con calor de 40 o más grados. De hecho, del 12 al 29 de junio se rompió el récord de días consecutivos con más de 40 grados centígrados vigente desde 1998, pero la nueva marca no duró mucho, pues del 8 al 27 de julio hubo otra larga jornada de calor intenso que duró 20 días.
Humberto Fernández Diez de Pino, director de Protección Civil y Bomberos, exhortó a la población a extremar los cuidados, principalmente con adultos mayores y menores de edad, así como todos aquellos ciudadanos que realicen actividades laborales al aire libre.
Evitando exponerse a los rayos del sol entre las 12:00 del mediodía y las 5:00 de la tarde, tomar agua, utilizar ropa con todos claros, usar gorra, lentes y protector solar. Además, es importante proteger a las mascotas de las altas temperaturas, tenerlas a la sombra y con suficiente agua fresca.