Además de los climas de ventana y los minisplits, los ventiladores de mesa o de pedestal son buenos para ayudar a calmar un poco el calor.
Estos aparatos más convencionales y económicos tienen que limpiarse frecuentemente, pues en sus aspas acumulan mucha tierra y polvo.
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Para evitar la acumulación de suciedad, debes quitar el polvo una vez por semana.
Si el ventilador está muy sucio, puedes hacer una limpieza más profunda con un limpiador de superficies y un trapo o paño de microfibra.
Métodos para limpiar tu ventilador sin la necesidad de desarmarlo.
1.- Con pasta de dientes sin abrirlo y sin tallar
Materiales:
- 1 cucharada de pasta de dientes.
- 3 cucharadas de vinagre blanco.
- 300 ml de agua tibia.
- 3 cucharadas de jabón líquido para trastes.
- 1 cucharada de alcohol.
- 1 bolsa de basura grande.
Paso a paso:
- Mezcla todos los ingredientes en un recipiente. Una vez que estén bien integrados vierte la mezcla a un recipiente con atomizador.
- Rocía la mezcla por todo el ventilador para que todo el abanico se llene bien de tu solución.
- Recuerda evitar la parte donde está el motor, solo rocía los abanicos y la rejilla.
- Una vez que esté bien impregnado de esta mezcla, cubre el ventilador con la bolsa de plástico y cubre bien todas las partes del ventilador NO el motor.
- Pon en marcha el ventilador por tres minutos y pasado ese tiempo apágalo y retira la bolsa.
2.- Limpiar el ventilador con una esponja
Desenchufe y desarme cuidadosamente su ventilador. Luego use una esponja, humedecida con detergente para limpiar y restaurar el aspecto de la pieza.
Destacamos la importancia de secar muy bien todas las aberturas para su posterior uso.