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De acuerdo a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), en México hay seis clases sociales, lo cual depende de varios factores, como costumbres, situación económica y poder adquisitivo. Se clasifican de la siguiente forma:
- Baja-baja: Según Profeco, esta es la clase social más numerosa, pues 35 de cada 100 mexicanos forman parte de sus filas. La integran empleados temporales, vendedores informales, migrantes, desempleados y ciudadanos que dependen de la asistencia social, pública o privada.
- Baja-alta: La conforman obreros y campesinos, y en total, 20 de cada 100 mexicanos son parte de ella. De acuerdo a la Profeco, es la “fuerza física de la sociedad”.
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Realiza trabajos arduos a cambio de un ingreso ligeramente superior al salario mínimo
- Media-baja: Otros 20 mexicanos de cada 100 son parte de esta clase social, un poco más favorecida que la anterior, pues tienen ingresos estables, pero no altos. Son oficinistas, técnicos, supervisores y artesanos calificados.
- Media-alta: La dependencia define a este estrato social como “hombres de negocios y profesionales que han triunfado”. Pertenecen a ella 14 de cada 100; tienen ingresos estables y altos.
- Alta-baja: La conforman familias con alto poder adquisitivo. Sólo cinco de cada 100 mexicanos pertenecen a ella. Sus ingresos son estables y muy elevados.
- Alta-alta: En esta élite económica sólo se encuentra uno de cada 100 mexicanos. Son ricos desde hace varias generaciones, tanto así que ya “olvidaron” cómo hicieron su dinero. De acuerdo a la Profeco, “las posesiones son un indicador de estatus”
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