CIUDAD DE MÉXICO.- Debido a los movimientos e inversiones que se están dando como efecto del nearshoring, México recibiría 33 mil 600 millones de dólares adicionales en el valor de las exportaciones no petroleras al año, de acuerdo con estimaciones de Banorte.
En cinco años, el país acumularía un valor de 168 mil 100 millones de dólares en las exportaciones adicionales, informó Alejandro Padilla, director general adjunto de Análisis Económico y Financiero de Banorte.
Agregando el efecto que traería el nearshoring a las exportaciones inerciales que se van dando, el valor sería mayor a los 68 mil millones de dólares al año.
“Juntando los dos efectos, el inercial y el estructural que se da con el tema de nearshoring, estamos hablando que el efecto neto podrá ser de 68 mil 800 millones de dólares al año, lo cual nos da una buena oportunidad para México”, detalló Padilla durante la presentación del informe “Zoom nearshoring”.
Los automóviles y autopartes son sectores bastante significativos en lo referente a la inversión del nearshoring, destacó Padilla. Recordó que existe una evolución de la industria automotriz, pues no sólo van a producir autos de combustión interna, ya que se está haciendo la transición con los híbridos y eléctricos, lo que implica una innovación de las fábricas de ese sector, lo cual inventiva la inversión.
Pero también para esta tendencia son relevantes las industrias farmacéuticas, de computación, monitores, cables, agroindustria, transporte, almacenamiento y logística.
“Hay muchas áreas de oportunidad en México que pueden proveer la palanca muy importante de crecimiento para los próximos años”, afirmó.
Comentó que el nearshoring es un cambio estructural y se ha convertido en una herramienta sobre el análisis de riesgo de las empresas.
“Nosotros entendemos el nearshoring ya no solamente como un tema de eficiencia de costos de las empresas, sino también una gestión de riesgos.
“Riesgos geopolíticos en el mundo, riesgos de la cadena de suministro y tratar de traer mucho más cercanas las cadenas a los centros de consumo final”, explicó.
Es a partir de la regionalización en bloques comerciales donde se abre la oportunidad para que a México vengan empresas a relocalizarse.