Durante la mañanera de hoy, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, recordó el sufrimiento de sus hijos en acoso y espionaje desde su infancia, agradeciéndoles la entereza mostrada hasta el momento.
Al borde de las lágrimas, el mandatario se sintió orgulloso sobre el espionaje sufrido por sus hijos, quienes se han mostrado resilientes por esta situación desde muy temprana edad.
“Yo tengo la ventaja, si se puede decir así, de que hemos sido espiados durante muchos años, desde que ellos estaban pequeñitos, cuando empezamos a ser oposición en Tabasco, nos costó trabajo conseguir escuelas”, relató el presidente en la conferencia matutina de este martes.
Contó como sus hijos saben manejar este tipo de situaciones, contando con carros de vigilancia en frente de su casa, desde Tabasco hasta la CDMX cuando su padre adquirió el mandato presidencial.
“Ellos han visto como cuando el movimiento en defensa del petróleo, allá por 1995, yo traía orden de aprehensión, me metieron todo el Código Penal, como 11 delitos y entonces para obligarme a que yo me amparara o me fugara pasaban helicópteros en la casa”, contó AMLO.
Con una voz entrecortada y espacios considerables de silencio, el presidente agradeció a las periodistas Lourdes Galaz y a Carmen Lira por haber ido por sus hijos cuando este era investigado en 1995 por el entonces Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), a cargo de Jorge Tello Peón.
“Ya ellos saben que es esto me da mucho orgullo, que resistan, se han portado bien aunque saben de que una cosa es lo familiar y otra cosa es el servicio público, mientras yo he sido dirigente, ellos no han ocupado un cargo ese es el acuerdo que tenemos”, destacó AMLO.
El recuerdo del sufrimiento de sus hijos en acoso y espionaje prepararon a la familia de AMLO para saber lidiar con estos temas.
Jesús García