A mitad del mes de diciembre una densa nube de partículas de hielo y polvo coincidirán en la órbita de la Tierra, estas partículas corresponden al asteroide 3200 Phaeton de donde se han desprendido.
El asteroide 3200 Phaeton, es una roca de cinco kilómetros de diámetro que cada 1,4 años roza al Sol y se interna más allá de Mercurio, pero, cuando sus escombros se internan en la atmósfera, su temperatura se eleva súbitamente formando bólidos que recorren el cielo en cuestión de segundos: se trata de las Gemínidas, la lluvia de estrellas más intensa del año.
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Si las condiciones climatológicas lo permiten, el espectáculo de la Luna en fase nueva acompañada de cientos de estrellas que recorrerán fugazmente el cielo, prometen ser uno de los momentos más románticos en el cielo nocturno. El fenómeno se podrá distinguir levemente, solo se verán 40 meteoros por hora, por lo que se debe de tener una buena buena atención al cielo estelar si quieres disfrutar del espectáculo.
¿Dónde se puede ver?
La región más favorecida para disfrutar la vista serán las regiones del norte, mientras más se esté en esta área, las posibilidades de observar las tonalidades blancas, amarillas y azules en el cielo nocturno serán mucho mayores.
Los días más favorecidos para poder notarlos en el cielo serán la madrugada de este 13 y 14 de diciembre, aunque se quedarán de una manera dispersa hasta el día 22 de diciembre.
En la región de la frontera, el momento más optimo de la noche para ver el espectáculo son las 23:30 horas, antes de que el brillo de la luna interrumpa la visibilidad del fenómeno astronómico.
¿Es necesario un telescopio?
Como cualquier lluvia de estrellas, no hace falta un telescopio, binoculares u otro instrumento óptico para disfrutar de las Gemínidas.
Para que sea más fácil la visualización, te recomendamos encontrar un sitio libre de contaminación lumínica y adoptar una posición cómoda con una vista despejada al cielo. Después de un tiempo en la oscuridad, el ojo humano se acostumbrará y los destellos, que varían en intensidad, comenzarán a aparecer ante los ojos del observador.