Desde que las aduanas marítimas y terrestres son administradas por las secretarías de Marina y Defensa, disminuyó el contrabando, aumentó el ingreso por recaudación y, ya no están tomadas por la delincuencia organizada, así como la de “cuello blanco”, afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Las modificaciones legales y administrativas para que las aduanas del país sean operadas por la Secretaría de Marina permitieron incrementar la captación de recursos por esta vía por lo que en este año se han recaudado un billón de pesos. “Imagínense un puerto en manos de gente sin disciplina, sin honestidad y sin lealtad a México.
¿Cómo enfrentar a la delincuencia organizada si era plata o plomo? Algunos no estaban de acuerdo con la decisión, pero no teníamos más que acudir a ustedes y ya estamos viendo los resultados del manejo de los puertos, de las aduanas, ya hay orden, hay combate al narcotráfico.
Al contrabando y por si fuese poco ha aumentado la recaudación en los puertos”, dijo el Mandatario. La celebración fue un nuevo espacio para que López Obrador exaltara a las Fuerzas Armadas, definiendo que las secretarías de Marina y la Defensa Nacional son “pilares” del Estado mexicano por su lealtad y disciplina.
“No sólo es un gran apoyo en esta tarea de seguridad pública que antes de esa reforma constitucional no se podía a pesar de haber disciplina, profesionalismo, honestidad y experiencia. No se podía contar con 375 mil elementos de la Defensa o 75 mil marinos.
Ya se resolvió eso, nos están ayudando por eso cada vez avanzamos más en garantizar la paz. Ahora que trabajamos juntos la Defensa y la Marina, la Secretaría de Seguridad Pública. Hoy cumplimos con mil reuniones de gabinete de seguridad”, refirió. En su momento, el secretario de Marina, Rafael Ojeda, describió las nuevas tareas que ha asumido la dependencia. “Ahora custodiamos y administramos las aduanas, además de los puertos, costas y mares. Apoyamos en la reactivación Corredor Tena, Istmo, a Coatzacoalcos, a Salina Cruz y Salina Cruz a Guatemala”, afirmó.