"Caras vemos, corazones no sabemos", es un dicho muy popular, porque podemos ver a alguien por la calle con total indiferencia, sin saber el abuso físico del que es víctima dentro de su casa, una nueva historia está causando indignación en México.
Una niña de 12 años alzó la voz, y denunció a su padre, quien presuntamente le habría causado múltiples lesiones, como quemaduras en todo su cuerpo, golpes, e incluso venderla al mejor postor como si fuera una mercancía.
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Se trata de la menor Juanita, quien vive en Apalani, en el Estado de Guerrero, una comunidad de escasos recursos, quien aseguró que ha sufrido abusos en su hogar desde los 4 años; tan solo la intervención divina de "la virgen de Guadalupe" pudo salvarla de ese infierno.
Juanita era víctima de los abusos de su padre y de la negligencia de su familia, compuesta por su madre y 9 hermanos más, incluso perdió algunas de sus extremidades.
Comentó en entrevista retomada de Telemundo, que fue la Virgen de Guadalupe quien la salvó, pues también en una ocasión la colgaron de una cuerda a un árbol y le pegaron hasta dejarla inconsciente.
"Le pegó feo a mi mamá y después a mí me pegó feo y me estaba ahorcando", dijo. "Me vendió mi papá, me dijo que no dijera nada y que no le denuncie" afirmó Juanita.
El Dr. Jesús Galeana, presidente de la Fundación Latidos de Amor, se mostró indignado por lo sucedido con Juanita, a quien apoyó después de ser vendida a otro hombre dentro de la comunidad y ella lograra escapar del abuso sexual.
"Esta historia me ha causado mucho dolor, indignación y tristeza, vivimos en un mundo cada vez más aterrador. Fue golpeada brutalmente por su padre, quien la colgó de un árbol con una soga en el cuello", escribió el Dr. Galeana en su cuenta de Instagram.
Notablemente ofendido, Galeana no puede creer que su propia familia se haya convertido en su cárcel y su padre se haya vuelto su verdugo personal:
"Me parte el alma verla llorar sin tener la respuesta más amorosa que sane su alma, escucharla gritar por las noches y repetir mil veces 'aléjate' me hace llorar internamente de coraje".
Juanita ha tenido una mejor vida luego de ser rescatada por la fundación. El 16 de mayo por fin pudo conocer el mar en Acapulco; su sonrisa desbordante llenó el corazón de Jesús, y de todos los que conocen su dura historia, una vida llena de abuso físico, pero con mucha esperanza por delante.
JGR