Las fotos de Amelio Robles no se ven diferentes de la de otros hombres que vivieron luchando en la época más convulsa de la historia de México, pero su caso es por demás interesante, hablamos de Amelio Robles, el héroe trans de la Revolución Mexicana.
El coronel Robles lleva puesto un traje oscuro abierto donde se asoma una pistola sujetada al cinturón. Sobre su cabeza lleva un sombrero que afina aún más susemblante y en su rostro se vislumbra una mirada dura.
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Amelio Robles, un héroe trans de la Revolución Mexicana muy macho
La típica imagen del macho revolucionario, pero una revisión más profunda a la vida de este revolucionarionos nos permite conocer una historia que no se aprecia a simple vista: Amelio fue un hombre trans que participó en la Revolución, logró ser nombrado coronel y tras una larga insistencia consiguió que su identidad de género fuera reconocida.
El guerrillero peleó al lado de Emiliano Zapata. Nació en Guerrero en1889, bautizado con el nombre de Amelia.
La chica y se caracterizaba por ser una mujer poco común para la época en la que se encontraba, ya que desde joven aprendió a utilizar las armas y domar y montar caballos, actividades que estaban relacionadas con los hombres.
Para 1912, a los 23 años, decidió unirse a la lucha revolucionaria en las filas zapatistas. Participó en tareas de mensajería, contrabando de armas y víveres, lucha armada y misiones especiales.
A raíz de su ingreso a las filas zapatistas, Amelia solicitó que se refirieran a ella en masculino, mientras comenzó a usar ropa considerada propia de los hombres. Pidió respeto para su nuevo nombre: Amelio.
La determinación del revolucionario de aparecer como un hombre no respondía a los csos algunas mujeres que participaron en la lucha vestidas de hombre para pasar desapercibidas para no correr el riesgo de ser violadas.
El deseo de Robles era ser identificado como hombre.
“Amelio Robles transitó de una identidad femenina impuesta a una masculinidad deseada: se sentía y se comportaba como hombre y su aspecto era varonil”.
El Coronel se reconstruyó una imagen corporal y una identidad masculina con los recursos a su alcance.
Con gran habilidad, Robles aprovechó la moda de los retratos de estudio, y periódicos ávidos de noticias sensacionalistas. Su caso les interesó a los medios y su difusión le otorgó una legitimidad a la historia del zapatista.
Lucha por su identidad
En 1918 se convirtió en soldado del Ejército mexicano. Su amistad con altos mandos del ejército metidos en la política, le permitieron que su identidad masculina fuera reconocida de forma oficial en la milicia y entre sus compañeros.
A quien se atrevía a desafiar su identidad, se burlaba o se refería a él con el género incorrecto corría el riesgo de enfrentarse a a balazos.
Se le saben de varias relaciones con mujeres de la época, entre ellas Ángela Torres, con quien adoptó una hija, y Lupita Barrón.
El título de coronel le fue otorgado por sus propios compañeros de batallas del Ejército Zapatista, pero no era reconocido por la Secretaría de la Defensa Nacional.
Debido a esto, dicha instancia no le concedió este título de manera oficial ni le otorgó una pensión militar.
Amelio, no Amelia
Pero un hecho estaba a su favor: en su expediente en los archivos militares había un acta de nacimiento apócrifa que lo identificaba como Amelio Malaquías Robles Ávila.
Debido a esto la Secretaría de la Defensa Nacional avaló la identidad de género de Amelio, ya que en 1974 lo condecoró como Veterano de la Revolución Mexicana, y no como veterana, título que le otorgaron a algunas mujeres de la lucha armada.
Amelio falleció en 1984 y curiosamente, pese a su empeño por ser reconocido como hombre, la Secretaría de la Mujer de Guerrero, la Dirección de Culturas Populares del CONACULTA y el Instituto Nacional de Antropología e Historia, abrieron un museo llamado Amelia Robles.
Además, una primaria en su pueblo natal lleva en su honor, pero con el nombre de Coronela Amelia Robles.
La participación de Coronel en la Revolución como un hombre transgénero cuya identidad fue reconocida con su nombramiento como coronel marca un hito en la historia de México.
La historia de Amelio Robles, el héroe trans de la Revolución Mexicana, marca el hecho de que la diversidad de género siempre han estado presente en nuestra realidad y ha tenido una participación clave en los diferentes acontecimientos históricos de México.