El Hotel Hamilton, uno de los edificios más antiguos de Laredo, Texas, ha sido señalado durante décadas como un punto clave del turismo paranormal.
Debido a los relatos de fantasmas, apariciones y sonidos misteriosos, su fama ha crecido entre los visitantes curiosos.
El enigma del Hotel Hamilton
El Hotel Hamilton de Laredo, Texas, situado en el número 815 de la avenida Salinas, es un nombre que resuena entre los amantes del misterio y las historias sobrenaturales.
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Su fachada antigua, su ubicación en el corazón histórico de la ciudad y los numerosos testimonios de visitantes que aseguran haber sentido “presencias invisibles” lo han convertido en una parada recurrente de los recorridos de fantasmas organizados en la zona.
Diversas plataformas digitales dedicadas al folclore paranormal, como HauntedPlaces.org, y cuentas de redes sociales de proyectos locales, entre ellos Laredo Ghost Tours, incluyen al Hamilton en sus listados de lugares “embrujados”.
Los relatos hablan de pasos en pasillos vacíos, murmullos sin origen aparente y figuras que desaparecen al ser observadas. No obstante, estos reportes se basan principalmente en anécdotas y experiencias personales que no cuentan con una verificación científica comrpobable.
Tradición oral
Su reputación espectral parece haber crecido más por tradición oral y atractivo turístico que por hechos comprobables. La historia del inmueble, testigo de más de un siglo de transformaciones urbanas, contribuye al misticismo que despierta entre locales y visitantes.
El hotel comparte protagonismo con otro sitio emblemático de Laredo: el Hotel La Posada, donde se narran episodios de luces que parpadean solas o corrientes de aire gélido que surgen de la nada.
Desde el año 2000, El Hotel Hamilton, con un área de 113 mil 462 pies cuadrados, funciona como una casa de personas jubiladas, a través de un programa asociado entre el sector público y privado.
La fascinación por lo desconocido
Aunque ambos edificios son considerados íconos del turismo paranormal, los especialistas en fenómenos inexplicables coinciden en que no existen datos empíricos que validen dichas experiencias.
Las historias fantasmagóricas sobre el Hotel Hamilton se sostienen en la delgada frontera entre la realidad y la fascinación humana por lo desconocido, donde el mito sigue siendo tan poderoso que es capaz de crear leyendas urbanas de gran peso.