Cuatro traficantes de humanos fueron sentenciados en Laredo, con su líder, a 13 años de encierro, por transportar en cajas de madera, en contenedores candadeados y bajo el piso de plataformas a migrantes, siempre impedidos de escapar de una posible muerte.
Diego Flores, de 29 años de edad, el jefe de la banda; Gerardo Villarreal, de 34 años y Gilberto Ríos, de 35, los tres de Mission, Texas, fueron condenados este miércoles 31 de julio en McAllen, por el juez federal Randy Crane, alcanzando penas de 13, 12 y 6 años de encierro respectivamente.
Así como el mexicano Antonio Cuevas Lozano, de 46 años, quien fue castigado con 2 años y medio de prisión por conspirar para traficar indocumentados, además de portación de armas de fuego en poder de convictos, para los dos primeros citados.
La banda criminal realizó sus actos movieron millares de extranjeros, contratando traileros para llevar cajas cerradas, o remolques plataforma, o peque??os cuartos o bodeguitas movibles con las personas, quienes siempre viajaban imposibilitadas de salir del compartimiento en que les metieron pues siempre iban cerradas con candado.
Tráfico de humanos
En abril del 2022 comenzó todo; el día 26, un trailero fue detenido en el checkpoint de Falfurrias, Texas con 40 indocumentados, ocultos dentro de cajas de madera, herméticamente cerradas.
También en julio 19, se recataron 69 indocumentados dentro de los áticos de cobertizos, graneros, “bodeguitas” o graneros cerrados que tráiler's llevaban en plataformas. Y 28 más entre rollos de henos, empacadas junto con la pastura en formas cilíndricas transportadas en “camas bajas”.
Según los informes policiacos, en un rancho de Diego Flores, en Mission, Texas, hacían todos los sitios de escondite y colocaban a todos los extranjeros, ahí transportistas contratados iban a recoger los remolques.
Al respecto, los traileros no sabían de habían personas dentro de estos sitios cerrados, siendo cómplices indirectos del tráfico de humanos.
Diego Flores, el líder de la agrupación, ya había sido sentenciado por lo mismo. El juez Crane destacó lo inhumano y el excesivo uso de armas de fuego para someter a los extranjeros.
El 1 de febrero pasado fue sentenciado un quinto traficante, Noé Vázquez, le dieron 12 años de cárcel.