Pareja fue sorprendida en la ciudad ribereña de Álamo, vendiendo animales exóticos como cachorros de Margay o tigrillo y de Jaguar, lo hacían afuera de una tienda de artículos de deporte al aire libre e implementos para el campismo.
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El emigrado o tarjeta verde Rafael Gutiérrez Galván, de 29 años de edad, y su esposa norteamericana Deyanira Garza, de 28, podrían alcanzar hasta 5 años de cárcel y multa de hasta 20 mil dólares, cada uno, al ser sorprendidos el 24 de agosto pasado, vendiendo primero un Margay en 7 mil 500 dólares, el margay es conocido también como gato tigre, tigrillo, Maracayá o Yaguatirica, se reproduce en el norte de México.
El delito federal es el de vender vida silvestre protegida, dijo Alamdar Hamdani, Fiscal Federal para el Sur de Texas.
Este miércoles 27 hicieron su primera aparición ante un juez federal en McAllen, Texas, ni el residente legal, ni la estadounidense, quienes viven en Alamo City, población ubicada entre San Juan y Donna, tienen licencia para vender, comerciar o transportar animales exóticos, como margay y jaguares.
La autoridad recuperó los dos cachorros y se le aplicó la sanción que comprende la Ley De Los Grandes Felinos, entrada en vigor apenas en diciembre del año pasado, que habla de la prohibición de la importación, transportación, venta y posesión de este tipo de especies de la vida silvestre.
El hombre podría perder su residencia legal, por este delito del orden federal, que consiste en vender animales exóticos.