Traficaban indocumentados por Laredo, Texas, en camionetas de trabajo; las trocas pesadas rodeaban a campo traviesa los puntos de revisión federal en las carreteras, ahora fueron condenados a 10 años de cárcel cada uno, son los Beltrán de Houston, Texas.
Andrés Beltrán junior y José Luis Beltrán Mondragón, de 36 y 28 años de edad, respectivamente, empezaron de “coyotes” y terminaron siendo líderes de una banda de traficantes de humanos, que contrató a varios cómplices como choferes para llevar a los extranjeros hacia esa metrópoli texana.
Conspiración para transportar indocumentados, es el delito por el que ahora fue sentenciado el mayor de los dos, pero antes, también le dieron una década de encierro al menor.
Solo 45 minutos deliberó esta vez el jurado para encontrar el castigo para Andrés Beltrán, a quien el 14 de diciembre le había declarado culpable, el juicio llevó tres días ante la juez Micaela Álvarez.
Este par tenía un plan muy sofisticado para mover a los extranjeros en camionetas, siempre fuera de las carreteras tratándose de la zona fronteriza y hasta después de los “checkpoints” de la Patrulla Fronteriza.
Solo en cinco meses, de febrero a junio del año 2020, transportaron a cientos de indocumentados, circundaban de Río Grande City a Laredo y de esta frontera a Houston.
Los alojaban en un rancho de Río Grande, ubicado a 100 millas de Laredo, luego ya con suficiente carga humana, los Beltrán venían desde Houston y cada uno en una camioneta pick up, escoltaba a otras trocas similares, a través de ranchos, en brechas y caminos, fuera de las carreteras, siempre esquivando la vigilancia de los puntos de revisión.
Hasta que ocurrió un accidente-volcadura, con un extranjero herido muy grave, ahí fue cuando todo se vino abajo.
Los federales se movieron rápido y les hallaron a más de 100 extranjeros en sus dominios