Este lunes, el gobernador de Texas, Greg Abbott, promulgó la polémica Senate Bill 4 (S.B.4), una nueva legislación que establece medidas severas contra los inmigrantes, generando un amplio debate sobre su constitucionalidad y sus posibles impactos en la sociedad.
Ley SB4 de Texas
La SB4 establece que el ingreso irregular a Texas por su frontera será considerado como un delito, y la reincidencia constituirá un crimen.
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Las penas varían, siendo la primera infracción castigada con un máximo de seis meses de cárcel, mientras que la reincidencia puede conllevar penas de 10 a 20 años de prisión.
Además, la ley otorga a las autoridades locales y estatales el poder de exigir documentación a cualquier persona que consideren sospechosa basándose en su apariencia.
La falta de documentos podría resultar en detención y arresto, con la posibilidad de ser enviados a la cárcel por orden judicial o enfrentar la deportación a México.
Aquellos que se nieguen a cumplir con la orden de deportación podrían enfrentar penas de dos a 20 años de prisión.
Estea ley no solo impone medidas punitivas a los inmigrantes indocumentados, sino que también destina 1,500 millones de dólares para la construcción de un muro fronterizo en el estado, una iniciativa que recuerda las políticas migratorias del gobierno anterior.
¿Es inconstitucional?
A pesar de su programada entrada en vigor a partir del cinco de marzo de 2024, organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes, como la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), están preparándose para impugnar la ley.
La ACLU considera que este mandato es un atropello y argumenta que históricamente, las leyes estatales que intentan superar la legislación federal en temas de inmigración han sido declaradas inconstitucionales.
Representantes demócratas han expresado su preocupación, comparando la situación con la ley "muéstrame tus documentos" en Arizona hace más de una década. En 2012, la Corte Suprema declaró inconstitucional partes de la ley de Arizona por exceder los poderes del gobierno estatal.
Racismo y xenofobia
La aprobación de la nueva disposición ha levantado preocupaciones sobre el aumento del racismo y la xenofobia en Estados Unidos.
La ACLU la ha calificado como "una de las acciones legislativas antiinmigrantes más extremas que haya evidenciado", advirtiendo que las libertades otorgadas a la Policía podrían resultar en el perfilamiento y persecución de personas afroamericanas y no blancas.
Organizaciones como el Servicio Luterano de Inmigración y Refugiados han criticado la ley por alejarse de los valores de compasión y debido proceso, considerándola un rechazo a los principios humanitarios que definen a la nación.
El gobierno federal también ha expresado su preocupación, destacando que la ley podría poner en peligro a las comunidades de Texas, subrayando que la potestad de decidir sobre asuntos de inmigración recae en el gobierno federal, no en los estados individuales.
Mientras la SB4 se prepara para entrar en vigor, la ACLU y el Centro de Recursos Jurídicos para Inmigrantes han compartido guías prácticas detalladas sobre las implicaciones y consecuencias de la legislación, proporcionando información crucial para aquellos que podrían enfrentar situaciones legales bajo esta nueva ley.