RITO SATÁNICO

Supuesto asesino de Laredo cumple 31 años en la cárcel VIDEO

Fue detenido y sentenciado a muerte a los 17 años por el asesinato de un pastor y restaurantero del Arby's, según porque 'El diablo quería su alma'

La historia está en Netflix
Crimen en Laredo, Texas.La historia está en NetflixCréditos: El Mañana
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Escrito en LAREDO TEXAS el

Es una escalofriante historia Laredo, Texas, en la década de los 90, donde fueron asesinadas tres personas mientras dormían, los participantes de tal masacre fueron tres jóvenes, pero solo dos fueron sentenciados a la pena capital.

Las autoridades que investigaron dicho homicidio dijeron que se trató de un robo al domicilio donde dormían las víctimas y que todo se salió de control, incluso se añadió que la escena del crimen tenía tintes satánicos debido a que se encontró una cruz invertida entre otras cosas según la investigación oficial.

El homicidio ocurrido al norte de Laredo conmocionó a los habitantes debido a la sangrienta escena, el arma que se usó para cometer el asesinato de las tres personas fue un hacha para cortar leña.

Uno de los cuerpos quedó en la sala de James Smiley.

Hasta ahora que Netflix hizo pública la historia del crimen dejó ver que la investigación estuvo incompleta porque hubo una persona involucrada que no pisó la cárcel, incluso en entrevista con los acusados dejaron que el otro cómplice era culpable, pero que no fue encarcelado debido a que su padre era un famoso juez de Laredo en aquella época.

¿Qué pasó en 1991 en Laredo, Texas?

En aquellos años los acusados y sentenciados Miguel Ángel Martínez y Miguel Ángel Venegas tenían 17 y 16 años, se encontraban en la casa de su amigo Milo Flores, los jóvenes estaban jugando videojuegos y bebiendo cerveza e incluso consumiendo algunas drogas, según la investigación.

Según una declaración de Venegas dijo que desde muy pequeño supo que era "el hijo del diablo" y que aquella noche sentía la necesidad de hacer algo, pues se sentía aburrido.

Miguel Ángel Martínez y Miguel Ángel Venegas.

Fue entonces cuando los tres jóvenes acudieron a la casa de James Smiley un pastor de una iglesia bautista y conocido de Miguel Ángel Martínez, sabían que el adulto vivía solo y que podría ser un blanco fácil para robarlo. 

La investigación dice que Miguel Ángel Venegas tomó un cuchillo y una hacha para cortar madera del garaje de Milo Flores antes de irse a la casa de James Smiley. Más tarde, Venegas tendría la idea de asesinar quiénes se encontraban durmiendo dentro de la casa.

Milo Flores, quien acompañó a los asesinos.

Mala suerte para quienes acompañaban a James Smiley aquella noche.

Cuando llegaron al domicilio de James, Martínez y Venegas bajaron del automóvil mientras que Milo se quedaría esperando en el auto, los dos jóvenes que bajaron rodearon la casa y se asomaron por la ventana y vieron que Smiley no estaba solo dormido en la casa, vieron que dos personas más estaban dentro.

James Smiley

Según Martínez, Venegas había estado hablando sobre cosas del diablo aquel día y todo se complicó dentro de la habitación que tenían a tres personas indefensas durmiendo.

'Más almas al diablo'. Fueron las palabras de Miguel Ángel Venegas al ver las tres personas duemiendo

Al ver la escena tranquila y en la oscuridad, y sin ninguna provocación, Venegas descargó su hacha sobre el cráneo del hombre, antes de sacar un cuchillo y apuñalarlo repetidamente en el estómago, haciendo que la sangre saliera a borbotones por el suelo.

"La parte que recuerdo es Venegas mirándome con el cuchillo y diciéndome que era mi turno [de apuñalar el cadáver]. "Desplegué mi cuchillo, miré el cuerpo allí, lo apuñalé y caminé hacia el patio trasero".

James Smiley y los otros dos cuerpos fueron identificados como Rubén Martínez, de 20 años, y Daniel Duénez, de 14 años, ambos de Nuevo Laredo, Tamaulipas.

En la sangrienta escena encontraron un crucifijo invertido.

No pasó mucho tiempo antes de que Flores, el hijo del juez de distrito del estado, le dijera a la policía que sus amigos llevaron a cabo los asesinatos con armas tomadas de su casa, y Martínez fue arrestado y sentenciado a muerte en 1992.

Detenidos y encarcelados 

Aunque no había dado los golpes finales, Martínez participó en la planificación y ejecución del crimen, y una vez sentenciado, a los 17 años, se convirtió en la persona más joven en ser enviada al corredor de la muerte de Texas.

Milo Flores admitió suministrar armas y conducir a Venegas y Martínez al barrio de Smiley, pero la policía no lo acusó.

Vanegas fue condenado a 41 años de prisión, esquivando la aguja solo porque tenía 16 años cuando cometió los asesinatos.

Una década más tarde, en 2002, la sentencia de Martínez fue conmutada para reflejar su papel menor en el crimen, y en su lugar recibió cadena perpetua.

Esta terrible historia que conmocionó a todos en Laredo y Nuevo Laredo la puedes ver en la plataforma Netflix llamada "Soy un Asesino" y tiene entrevistas con los que participaron en aquel terrible delito.