Un hombre llamó al 911 denunciando allanamiento de su vehículo con posible intención de robo, pero todo fue mentira. El tipo quería que llegara la policía para pedirle un “aventón” al antro y seguir tomando.
Eran las 2:00 de la mañana del lunes 12 cuando cuatro patrulleros llegaron a la casa de Efraín Aranda, de 34 años de edad, en la cuadra 1 oeste de la calle Frost, entre las avenidas McDonell y Monterrey, barrio “Siete Nuevo”, en la región central de la ciudad.
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El hombre les dijo a los policías que descubrió su Ford Expedition, año 1999, abierta y con las luces encendidas, como que alguien se metió e intentó llevársela o hurtar artículos de valor dentro de la misma.
Ya en la averiguación ahí en la casa del quejoso, Aranda le confió a uno de los oficiales, que la verdad es que había llamado para que ya estando ahí los patrulleros les pediría un “ride”, pues su intención era ir al bar Blue Moon, en la cuadra 98 de McPherson, para seguir la fiesta.
Lo ficharon, lo encerraron en la Cárcel Regional del Condado de Webb y el Juez de Paz en turno le fijó una fianza de 500 dólares por el cargo de falsa alarma a la policía.